Con 340 votos a favor, el Pleno avaló el dictamen de la Comisión de Agricultura y Ganadería por el que se reforma y adicionan diversas disposiciones de la Ley Federal de Sanidad Animal, con el objeto de proteger la salud del consumidor por medio del control de calidad e inocuidad de los alimentos.

En tribuna, el diputado Gonzalo Alemán Migliolo (PRI) indicó que los productores mexicanos enfrentan una competencia desleal, ya que cuando ingresan a México productos de desecho a precios por debajo de los del mercado, el consumidor los adquiere pensando que adquiere calidad y paga precios que no corresponden arriesgando, incluso, su salud.

De igual forma, manifestó que México importa 530 mil toneladas de carne al año lo que representa aproximadamente el 40 por ciento del consumo nacional; por tal motivo, la falta de verificación implica un alto riesgo.

“Las omisiones por parte de las autoridades encargadas de la inspección de los productos destinados al consumo humano implican violaciones a la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas, por lo tanto, deben sancionarse con todo el rigor de la ley”, aseveró el legislador.

En tanto que el diputado Antonio Mejía Haro (PRD) agregó que se consideran penas de 4 a 8 años de prisión y multa de 500 hasta 3 mil salarios mínimos vigentes en la zona a quien importe, posea, transporte, almacene y comercialice con cualquier sustancia cuyo uso este prohibido para la alimentación de los animales en las disposiciones legales aplicables o en las normas oficiales mexicanas emitidas por la Sagarpa.

Mejía Haro aseguró que muchas de las plagas y enfermedades que afectan la ganadería nacional han sido derivadas de las importaciones de animales vivos procedentes, principalmente, de los Estados Unidos de Norteamérica.

En su oportunidad, el legislador Mario Ernesto Dávila Aranda (PAN), señaló la necesidad de fortalecer las medidas nacionales de protección sanitaria, así como dejar de tolerar que México sea el cesto de basura para los desechos de otros países.

El documento establece la necesidad de que la inspección sanitaria-veterinaria de animales vivos para su importación se realice en el país de origen, con el fin de evitar introducir enfermedades y plagas a territorio nacional.

Asimismo, con la entrada en vigor de los acuerdos de libre comercio, es necesario asegurarse que los alimentos de origen animal cumplan con los requisitos que se exigen a los correspondientes de producción nacional.

Una vez terminada la sesión del día de hoy, se citó para la que tendrá efecto el lunes 28 de febrero a las 11 horas.