Librar del pago de comisiones a los usuarios de tarjetas de débito que provengan de una cuenta de nómina y exigirle al Banco de México que regule las tarifas que cobran las sucursales bancarias por sus servicios, son los objetivos de las iniciativas que presentaron los diputados Juan Guerra Ochoa y Pablo Trejo Pérez, ambos del PRD.

“En 2006 los bancos obtuvieron 676 mil millones de pesos sólo por el cobro de comisiones a trabajadores que se les paga su nómina a través de una tarjeta de débito; ése es dinero que le quitan a la gente de su salario”, explicó Guerra Ochoa.

Eximir del pago de comisiones sería en beneficio de los usuarios de más de 35 millones de tarjetas de débito que usan cuentas de nómina, “un mecanismo moderno de pago que hace eficiente la relación laboral”, agregó.

“Para los bancos debería ser suficiente con las utilidades que obtienen por manejar el dinero de la cuentas de nómina en sus operaciones; no tienen por qué cobrar a los cuenta-habientes comisiones por el uso de sus tarjetas de débito”, argumentó.

El objetivo de reformar los artículos 48 de la Ley de Instituciones de Crédito y 85 de la Ley Federal del Trabajo es establecer que los bancos que den el servicio de pago de nómina no cobren comisiones, ya que manejar tal volumen de recursos es en sí ya un beneficio.

En el mismo tenor, el diputado Pablo Trejo Pérez presentó reformas a los artículos 4 y 5 de la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros y 43 de la Ley del Banco de México.

El objetivo es obligar al Banco de México a que regule el cobro de comisiones y cuotas interbancarias que realicen las entidades financieras, facultad que le otorga la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros.

También se establecería que, de no hacerlo, se podría considerar una responsabilidad administrativa de su titular, lo que implicaría su destitución.

Trejo Pérez acotó que en un análisis de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicio Financiero (Condusef) se indica que seis bancos dominan el mercado de México. Éstos tienen las tarifas más altas por disposición de efectivo en sus diversas modalidades y por concepto de anualidad, tanto en cuenta de cheques como en tarjeta de crédito.

Hay que hacer que el Banco de México cumpla con sus obligaciones; es en beneficio de todos los usuarios del sistema bancario de México, dijo.

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