Ante la creciente demanda de productos cárnicos y en especial de la producción de carne de res, el sector ganadero optó por mejores tecnologías de crianza, a fin de elevar el número de cabezas que se sacrifican al año (5 millones).

Tal situación ha provocado que en México sean utilizadossistemas de engorda basados en el uso de beta-agonistas como el clembuterol, cuya utilidad aumenta hasta en un 20 por ciento la proteína en el músculo del animal y disminuye 16 por ciento su grasa.

Este panorama convocó al diputado José Rubén Escajeda Jiménez (PRI) a manifestarse a través de un punto de acuerdo en contra de esta práctica; el fin es que la SAGARPA, SSA y la Comisión Federal de Mejora Regulatoria emitan el dictamen final conducente a la publicación de la Norma Oficial Mexicana sobre las especificaciones técnicas para la erradicación del uso de estas sustancias no autorizados.

Escajeda Jiménez detalló que estudios del 2002 revelaron que al menos el 20 por ciento de la producción nacional de res había recibido algún tipo de tratamiento hormonal. “El uso indiscriminado de estas hormonas pone en riesgo la salud de los consumidores”.

Indicó que comer carne contaminada con clembuterol produce una sintomatología caracterizada por dolores musculares, taquicardia, temblores y dolores de cabeza, que inhabilitan totalmente a los pacientes por un periodo máximo de 30 días.

Precisó que a pesar de que las autoridades conocen el riesgo que representa para la salud pública el uso de estos productos, se siguen autorizando.

El diputado priísta consideró que la Sagarpa ha sido ineficiente al no expedir una norma definitiva que regule tal problemática. “Ejemplo de ello es la denominada Norma Oficial Mexicana de emergencia para el control del uso de estas sustancias en los animales, que en nada ayudó”.

Sostuvo que se ha soslayado que la industria de la carne en México es la tercera más importante después de los lácteos y del pan, dentro del sector de la comida procesada.

“La Secretaría de Agricultura tiene la obligación ineludible de garantizar el suministro de alimentos sanos e inocuos para la población, por lo cual es su obligación intervenir en forma inmediata, seria y responsable en la atención de este asunto”, aseguró.

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