La Comisión de Ciencia y Tecnología se reunió con investigadores para conocer los avances en materia de clonación terapéutica y la situación que guarda la clonación reproductiva humana.

La presidenta de este órgano legislativo, Silvia Luna Rodríguez (Nueva Alianza), destacó que para legislar en la materia es necesario allegarse de la mayor cantidad de información.

En este sentido, fueron invitados a una mesa de trabajo los investigadores y expertos en clonación, Rubén Lisker, Ricardo Tapia y Héctor Mayani Viveros, además del ex presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Luis de la Barreda.

Sobre el tema, el diputado del PRD, Javier González Garza, destacó que nadie está dispuesto a permitir la clonación humana; sin embargo, dijo que tampoco se puede detener la investigación en torno de la terapéutica que se realiza a través de células madre y troncales.

Dijo que su posición es obtener toda la información posible y legislar conforme a lo que establece la Constitución anteponiendo los razonamientos científicos a las creencias.

“En mi opinión, estamos frente a investigaciones fundamentales para la raza humana, para tomar decisiones de este tamaño debemos hacerlo con información oportuna. Lo peor que podemos hacer es engañar en un asunto de esta naturaleza, pero está claro que las investigaciones no se deben frenar”, apuntó.

Por su parte, el diputado Jesús Flores Morfín (PAN) señaló que para legislar en la materia es necesario abrir el debate; sin embargo, dijo, de ninguna manera se debe confrontar a la religión con la ciencia.

Luego de cuestionar a los investigadores sobre si el embrión que se utiliza en las investigaciones terapéuticas es o no un ser humano, el legislador panista sostuvo que hasta en tanto no exista una demostración científica se debe brindar la protección a la vida humana.

“Donde haya duda, debe protegerse y en este sentido se debe respetar la probabilidad de vida de un embrión. En el momento que alguien me diga con certeza cuándo un embrión es un ser humano y cuándo no, doy mi aval para utilizar a ese ser humano en cuestiones terapéuticas”, subrayó.

El también legislador de Acción Nacional, Salvador Arredondo Ibarra, coincidió con Flores Morfín y difirió del posicionamiento de los investigadores a quienes señaló que, desde el punto de vista de los derechos humanos, se debe dar un trato digno al embrión.

“Nadie se opone a la investigación, pero no se puede experimentar con seres humanos. Estaríamos poniendo en riesgo al género humano”, y agregó que los ensayos deben hacerse con animales de laboratorio.

En tanto, el diputado Wenceslao Herrera Coyac (PRI) dijo que se debe apoyar la clonación terapéutica, toda vez que en zonas rurales e indígenas fallecen cientos de personas por enfermedades hasta ahora intratables como el cáncer.

Mencionó que una de las tareas de la Comisión de Ciencia y Tecnología es convencer a todos los legisladores sobre la importancia que tiene apoyar el desarrollo de la investigación científica y destinar mayores recursos.

“México, como en todas las áreas de la investigación, no debe quedarse fuera, de lo contrario seguiremos siendo un país subdesarrollado”.

Previo a ello, el doctor Rubén Lisker, director de investigación del Instituto de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Subirán”, indicó que en materia de clonación existen dos tipos: la reproductiva y la terapéutica.

Sobre esta última, opinó que debe permitirse la investigación ya que su objetivo es obtener células troncales o totipotenciales por medio de blastocistos, cordón umbilical o de embriones sobrantes de procesos de fertilización asistida para convertirlas en tejidos que serían utilizados en trasplantes específicos.

Indicó que recientemente en la clonación terapéutica se ha publicado que dichas células podrían obtenerse del líquido amniótico, lo que quitaría toda objeción ética sobre el uso de embriones.

El doctor Héctor Mayani, del Centro Médico Nacional Siglo XXI, quien ha trabajado por más de 20 años con células troncales del sistema hematopoyético o que dan origen a la sangre, señaló que la clonación terapéutica es fundamental y se deben desarrollar programas de investigación que permitan encontrar nuevos tratamientos para diversas enfermedades.

Por su parte, el doctor Ricardo Tapia, investigador emérito de la UNAM, estimó importante que se siga discutiendo el tema de la clonación para legislar con un apropiado conocimiento.

Coincidió que la clonación terapéutica busca tratamientos para las enfermedades que se caracterizan por la degeneración celular y para las cuales no hay curas efectivas.

Indicó que enfermedades como Alzheimer, Parkinson, Huntington, esclerosis múltiple, embolias cerebrales y algunos tipos de cáncer, entre otras, son graves y discapacitantes, además de que su frecuencia tiende a aumentar cada vez más entre la población.

Por ello, agregó, se debe permitir la investigación y desarrollo de la clonación terápeutica, cuyo objetivo es generar tejidos de reemplazo o células que protejan o salven a las dañadas a partir de las troncales.

Concluyó que en la comunidad científica internacional nadie acepta la práctica de la clonación reproductiva, sin embargo la terapéutica sí es apoyada masivamente.

Finalmente, Luis de la Barreda Solórzano, ex presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, argumentó que no hay razones para considerar que se está atentando contra la vida de un ser humano al utilizar embriones o blastocitos en la práctica de la clonación terapéutica, por lo que prohibir estas investigaciones sería un obstáculo inaceptable para el progreso científico y el desarrollo del derecho a la salud en México.

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