Diputados del PRI y PRD solicitaron a la Secretaríade Hacienda información sobre las corridas financieras del impacto por el Impuesto contra la Informalidad (ICI) y la Contribución Empresarial de Tasa Única (CETU), en la generación de empleos, la industria maquiladora y la mano de obra; en tanto que el subsecretario de Ingresos, Fernando Sánchez Ugarte, dijo que la Reforma Fiscal no es un proceso terminado, sino que requiere de esfuerzos para ser aceptable para todos.

En reunión de trabajo con el funcionario y el jefe del Sistema de Administración Tributaria (SAT), José María Zubiría Maqueo, para analizar dichos impuestos, el presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, Jorge Estefan Chidiac (PRI), aseguró que el CETU tapará los hoyos que hay en evasión; “es sensato e ingenioso, pero no queremos que se nos pase la mano”.

Solicitó ampliar la información y hacer corridas financieras sobre la posible afectación del impuesto en la generación de empleos, en la industria maquiladora y la mano de obra, así como transparentar el esquema de la doble tributación y revisar el tema de las asociaciones civiles sin fines de lucro que sí cobran cuotas y la aplicación del gravamen a la venta de propiedades.

Por su parte, el diputado Antonio Soto (PRD) aseguró que en la Reforma Fiscal se podrá transitar en un acuerdo legislativo si se presentan las corridas financieras sobre el impacto del CETU y se demuestra que es progresivo y que van a pagar quienes tienen mayores ingresos y ganancias.

El Frente Amplio Progresista, dijo, no quiere nuevos impuestos, pero si se presenta la información se podrá llegar en un acuerdo sin afectar a las personas de menores ingresos.

Aseguró que su partido analizará la propuesta del Ejecutivo, para conciliar entre las bondades que presenta Hacienda con las del FAP, pues de lo contrario, advirtió, sería irresponsable que por “intereses políticos” se tomara una determinación que afectara a la ciudadanía.

En tanto, el diputado Luis Xavier Maawad Robert (PAN), reconoció la disposición al diálogo de todos los partidos políticos y del Gobierno Federal, para llegar a consensos y acuerdos en la aprobación de una reforma, no como está planteada, sino que puede perfeccionarse.

En su exposición inicial, el subsecretario de Ingresos, Fernando Sánchez Ugarte, informó que con el nuevo gravamen se podrá reducir la pérdida recaudatoria en una tercera parte. Actualmente, precisó, el gobierno deja de recaudar 5.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB): 3.3 por ciento por tratamientos preferenciales y 2.1 de evasión.

De ahí que, explicó, el gravamen está orientado a reducir la incidencia sobre la recaudación de tratamientos preferenciales en ISR limitar el efecto de la elusión y atacar la evasión fiscal.

Destacó que el CETU es una contribución mínima general que fortalece el ISR y sustituye al IMPAC; no afecta a los contribuyentes cautivos, pero sí incluye a quienes tienen tratamientos preferenciales o evaden impuestos; plantea la simplicidad en el cálculo del impuesto y cuenta con sólo 22 artículos; favorece la inversión, la productividad y estímulos para la creación de empleos, mediante los créditos al salario y al empleo.

Precisó que las empresas de nueva creación no se verán afectas por el CETU, ya que podrán efectuar las deducciones correspondientes a sus inversiones iniciales.

Sánchez Ugarte aclaró que el nuevo impuesto no representa una carga fiscal para los trabajadores porque no incide en el factor productivo, además se propone el subsidio al empleo que beneficiará a quienes tienen menores ingresos y el crédito al salario.

En la ronda de preguntas, el diputado Juan Guerra Ochoa (PRD), cuestionó la afectación por el pago del CETU al 80 por ciento de las pequeñas y medianas empresas que generan empleo en el país, así como la falta de cuadros y corridas financieras.

Manuel Cárdenas Fonseca (NA), consideró que no se plantea la solución integral del SAT. En tanto, Horacio Garza Garza (PRI), dijo que no hay simplicidad en la ley porque las empresas van a mantener la misma complejidad, además de que algunas resultan beneficiadas pero otras no, al tener mano de obra excesiva y las maquilas perderán competitividad en el extranjero.

Del PAN, Ricardo Rodríguez preguntó cuánto deberán pagar los Repecos con el nuevo gravamen y qué pasará con ellos, ante una posible afectación.

En respuesta, el Subsecretario de Ingresos, Fernando Sánchez Ugarte, dijo que la Reforma Fiscal no debe verse como un proceso terminado, sino gradual que requiere esfuerzos para los próximos 20, en los que se tendrá que revisar todos los gravámenes de manera paulatina, incluyendo los estatales y locales.

Coincidió con el diputado del PRD, Antonio Soto, en construir una Reforma Fiscal aceptable para todos; “celebro que así sea, es un buen inicio”, dijo.

Explicó que el diseño del impuesto no tiene el propósito de incidir de manera negativa en la mano de obra ni afectar a la industria maquiladora ni a las pequeñas empresas. Al respecto, pidió evaluar la propuesta y revisar casos específicos o ejemplos, para llegar a un entendimiento sobre la problemática que pudiera haber.

El funcionario aseguró que este día tendrá una reunión con la industria maquiladora para analizar los efectos por el pago del CETU. En cuanto a los donativos, comentó que las personas que los realizan no presentan declaración, además de que en el caso de los Repecos se seguirá con el mismo tratamiento, pues no tendrán carga fiscal adicional.

Indicó que el acreditamiento del impuesto en el extranjero es un tema que se analiza con el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y otros países, para asegurar que el gravamen se incorpore a los tratados que México ha suscrito, pues cualquier cambio al régimen de ISR requiere de consulta.

Impuesto contra la Informalidad

En la reunión, el jefe del Servicio de Administración Tributaria, José María Zubiría, explicó las bondades del Impuesto contra Informalidad porque “es un gravamen de control para hacernos de información e incidir en la disminución de evasión fiscal, además cierra las pinzas en el combate a la evasión y a las actividades ilícitas”.

Precisó que por el ICI se obtendrán 7 mil millones de pesos. Su objetivo, indicó, es gravar con una tasa de 2 por cientolos depósitos bancarios que excedan los 20 mil pesos, a efecto de detectar ingresos provenientes de actividades que no se declaren.

Entre los principales beneficios destacó que se trata de una contribución general de control para que las autoridades fiscales identifiquen transacciones no declaradas por ISR e IVA; no afecta a los contribuyentes cautivos que paguen ISR, es una medida para mitigar la evasión fiscal y forma conciencia en las personas respecto de sus obligaciones tributarias.

Aclaró que los pagos de nómina vía instituciones financieras no se gravarán con el impuesto al igual que los pagos con cheque y en efectivo, en este caso, sólo si los montos son menores a los 20 mil pesos mensuales.

-- ooOoo --