Integrantes de la Comisión de Población, Fronteras y Asuntos Migratorios se reunieron con representantes de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), del Banco de México (BM), del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y de la Secretaría de Hacienda (SHCP) a fin de analizar el tema de remesas.

El diputado Carlos Alberto García González (PAN) explicó que el objetivo de la reunión fue conocer las acciones del gobierno para regular el envío de remesas al país para evitar que los familiares pierdan grandes cantidades por cobros excesivos de comisiones.

Edmundo Ramírez Martínez, diputado del PRI, señaló que es urgente regular la primera fuente de divisas de México, que en 2006 superó los 23 mil millones de dólares; además, dijo, se debe promover su uso en inversiones productivas, ya que se ha demostrado que el 98.5 por ciento de ese dinero se utiliza sólo para autoconsumo.

Pedro Guaso, Director General adjunto de Banca Institucional de Bansefi, indicó que una alternativa para bajar los costos del envío de dinero es que la gente lo haga a través de operaciones electrónicas, de una institución bancaria en Estados Unidos a una en México.

“Es una solución viable, ya que en una operación de este tipo sólo se cobra el 0.21 por ciento de cada dólar, lo que representa un ahorro de entre cinco y seis dólares por cada 100 que se envían.

“Sin embargo, hace falta popularizar este tipo de operación, por ello trabajamos en conjunto con la SRE para informar a los migrantes. El único problema es que sólo hay 470 instituciones financieras que aceptan abrirle una cuenta a un connacional”.

En ese sentido, Ana María Carrillo, directora de Asuntos Económicos de la SRE, aseguró que la Cancillería está promoviendo la bancarización de los migrantes para su acceso al servicio financiero de Estados Unidos, para ello expiden la “Matrícula Consular” que facilita la apertura de una cuenta en el banco.

“Hay 470 instituciones financieras en Estados Unidos que ya abren cuentas a nuestros connacionales a través de esta matrícula, pero aún nos falta capacitar a la gente para que aprenda a realizar envíos electrónicos”.

Por su parte, Salvador Bonilla, Gerente de Análisis y Medición del BM, sostuvo que las operaciones electrónicas son la vía adecuada para el envío de remesas, ya que la tasa de cambio peso-dólar la hacen las empresas en Estados Unidos, por lo que el gobierno mexicano queda sin herramientas para ayudar a los migrantes.

En tanto, Ximena Ortiz, representante de la Subsecretaría de Hacienda, advirtió a los diputados que la creación de una Ley de Remesas podría tener consecuencias económicas para los migrantes, puesto que este tipo de envíos ya está regulado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Asimismo, Roberto Bello Salcedo, Director General de Estudios sobre Consumo de la Profeco, precisó que esta institución ha hecho desde 1998 un estudio llamado “¿Quién es quién en el envío de dinero?”, en el que evalúan a las empresas dedicadas a esta actividad para que la gente sepa a quién acudir.

“El peor castigo para una empresa es que el consumidor deje de usar sus servicios, a eso se dedica Profeco, a evaluar y decirle a la gente cuál es su mejor opción.”

Por último, declaró que la Procuraduría no tiene registrada ninguna denuncia en contra de empresas que se dediquen al pago de remesas.

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