El jefe del Servicio de Administración Tributaria (SAT), José María Zubiría Maqueo, reconoció ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público que al interior de la dependencia persiste la corrupción, lo que impide afrontar con eficiencia los delitos de contrabando, evasión y elusión de impuestos.

En el marco del análisis de la iniciativa de Reforma Fiscal presentada por el Ejecutivo Federal, el jefe del SAT y otros funcionarios de la dependencia acudieron ante el órgano legislativo para responder las inquietudes en torno a la fiscalización de los recursos y la problemática que enfrenta para llevar a cabo su labor.

Ante el cuestionamiento de los legisladores David Figueroa Ortega (PAN), Jesús Ramírez Stabros (PRI), Joaquín Vela González (PT) y Manuel Cárdenas Fonseca (Nueva Alianza), en torno a la corrupción, Zubiría Maqueo aseveró que el SAT la ha tipificado en tres tipos; uno, derivado de la complejidad y cantidad de trámites que se presentan en el servicio público.

El segundo grupo, dijo, está asociada a la colusión, en donde, con el objeto de disminuir el pago de una contribución, el individuo busca una complicidad con el funcionario para romper el esquema con el que opera el sistema de recaudación.

El tercero, añadió, tiene que ver con la coerción, en donde la amenaza al funcionario público, particularmente por parte del crimen organizado, es la media.

Informó que en el SAT laboran cerca de 32 mil 500 personas, en donde el 70 por ciento toma decisiones que afectan intereses, por lo que se ha adoptado una estrategia encaminada, en primer lugar, a la simplificación administrativa, con el fin de minimizar los actos discrecionales.

Otra medida, indicó, es reforzar la administración de información y la técnica de riesgo para aumentar la probabilidad de que algún funcionario que cometa algún acto ilícito sea detectado o identificado. “Es decir, se reforzarán los mecanismos de seguridad interna y externa en torno a la filtración de información”.

Destacó que en los últimos tres años el Sistema de Administración Tributaria ha separado de sus funciones a más de mil personas por el delito de corrupción.

Añadió que otro mecanismo consiste en el hecho de publicar trimestralmente en Internet una encuesta de percepción de la corrupción. “En 2003 había una percepción negativa del 54 ó 55 por ciento y para junio de este año disminuye al 25 por ciento”.

Durante el desarrollo de la reunión, los diputados hicieron énfasis en el tema de las aduanas, al afirmar que persiste la corrupción de funcionarios y empleados, lo que pone en riesgo varias industrias del país y va en perjuicio de las finanzas nacionales.

Al respecto, Zubiría Maqueo aceptó que es ahí donde se percibe en mayor grado la corrupción por coerción, particularmente por parte del crimen organizado, por lo que planteó blindar la actividad de los funcionarios y dar protección a sus familias, toda vez que la delincuencia ha llegado a planteamientos muy agresivos.

“Gracias a la colaboración entre las oficinas de aduanas y de recaudación se han podido eliminar esquemas que favorecían la actividad del contrabando, sobre todo,porque mediante lagunas en el Código Fiscal se hacían, de manera perversa, devoluciones de impuestos”.

“El año pasado tipificamos como devoluciones de riesgo cerca de 6 mil millones de los 130 mil millones de pesos correspondiente a devoluciones de IVA”.

En la reunión, el administrador general de Auditoría Fiscal Federal, Alberto Real Benítez, reconoció ante los legisladores la evasión de impuestos que persiste en los sectores inmobiliario y textil, en las sociedades cooperativas, medio artístico y otros casos más como facturas apócrifas, marbetes, gasolineras y juegos y sorteos.

Sobre el primero, dijo, se ha detectado que este sector deduce terrenos indebidamente y diseña recursos en efectivo que no son detectados a través de las facturas o de la información que se registra.

En el segundo, indicó, se realizan operaciones en el exterior e introducen a territorio nacional mercancías subvaluadas, que no corresponden al valor real y que tiene que ser declarado en aduanas.

En el tercero, se ha detectado un esquema de carga laboral y fiscal de tal manera que los patrones tienen una disminución en las obligaciones y recursos y costos financieros que implica tener un número importante de trabajadores.

Otra cuestión que se revisa, añadió, son las operaciones que realizan diversos contribuyentes utilizando facturas apócrifas, que no corresponden a operaciones reales pero que se reportan como tales para determinar deducciones.

Informó que se han realizado dos programas para combatir estas conductas evasivas, y que, para ello, se lleva a cabo un análisis de toda la información que tiene el SAT. De las declaraciones que presentan los contribuyentes, de la de terceros, de los reportes de los gobiernos, proveedores y clientes para hacer una base de datos y cruzar información.

Destacó que con la propuesta del Impuesto Contra la Informalidad (ICI), se facilitaría la información que se genera de la transacción, que muchas veces se realiza en efectivo y que al día de hoy el SAT no tiene.

Finalmente, el SAT anunció la modernización de su portal de Internet, encaminada a simplificar los trámites de los contribuyentes con el fin de solucionar y eficientar la recaudación de impuestos.

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