México no está preparado para la apertura comercial de 2008, pactada en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), por lo que los productores agrícolas enfrentarán competencia desigual en la venta de maíz, frijol, caña y otros productos agropecuarios.

Coincidieron en lo anterior, los legisladores Carlos Ernesto Navarro López (PRD), presidente de la Comisión de Desarrollo Rural, y Ramón Barajas López (PRI), en la inauguración del Foro Por la Defensa del Maíz y la Soberanía Alimentaria.

Navarro Lópezdemandó que “en lugar de abrir la frontera al maíz o frijol extranjero, se deben proteger y apoyar a los más de tres millones de productores mexicanos”.

Informó que los productores de Estados Unidos y Canadá, además de contar con apoyos gubernamentales, gozan de mejores condiciones climáticas,investigación, maquinaria, “tienen todo para introducir su producto más barato al mercado nacional”, dijo.

Por su parte, el diputado Ramón Barajas López (PRI), secretario del Comité del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria, mencionó que “no estamos preparados para la apertura comercial de 2008, México sólo ha invertido 10 mil millones de dólares, comparados con los 180 mil millones de dólares que han invertido Estados Unidos y Canadá”

Denunció que “con la apertura, se verán afectados 30 millones de mexicanos, hombres y mujeres, además será una carga más para los productores de maíz”.

Navarro López declaró que a pesar de que México puede ser autosuficiente en la producción de maíz, se importan 10.7 millones de toneladas de dicho producto, así como el 80 por ciento del arroz y el 90 por ciento de la soya, “además somosel país que más importa leche en todo el mundo“.

Mencionó que “las regiones donde se produce el maíz o frijol, no están apoyadas, no se les ha incentivado a pesar de que son productos básicos en la dieta de los mexicanos”.

Refirió que la causa principal de la crisis agropecuaria es la dificultad en los trámites de las reglas de operación para la distribución de los recursos,“entonces, programas que están bien diseñados no aterrizan en el campo, porque las reglas que expide el Ejecutivo, mediante las dependencias a su cargo, son engañosas y complicadas”.

El legislador perredista se pronunció por buscar mecanismos que simplifiquen las reglas de operación “para que los campesinos no tengan que cubrir tanto papeleo para allegarse los recursos que aprobamos los diputados”.

Navarro López acusó que son los grandes exportadores quienes se quedan con los apoyos oficiales y subsidios que avala el Congreso, a pesar de que, en su mayoría, no se dedican a producir alimentos, “lo que hacen es comprar y acaparar, poreso la crisis de la tortilla en enero, obtuvieron amil 350 pesos la tonelada de maíz y la vendieron a 3 mil, ganaron seis mil millones de pesos con esa operación”.

A su vez, Barajas López señaló que “de nada sirve que estemos aprobando recursos y que tengamos la voluntad de etiquetar, si tenemos la insensibilidad de los funcionarios y Secretarías para poder aterrizar esos recursos”.

En dicho foro, veinticinco organizaciones abordarán temas referentes a la problemática de la producción agrícola en México, como son la defensa del maíz, soberanía alimentaria, agrobiodiversidad de los pueblos indios, análisis de estrategias y políticas agroalimentarias globales y gubernamentales, así como cultura campesina.

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