Durante la inauguración de la exposición “El Distrito Federal sí Tiene Campo”, el diputado Carlos Ernesto Navarro López (PRD), presidente de la Comisión de Desarrollo Rural, señaló que este órgano legislativo buscará asignaciones presupuestales encaminadas al progreso del sector agrícola de la Ciudad de México.

Explicó que el año pasado los diputados tuvieron una mala experiencia, pues los representantes de las autoridades federales no respaldaron su petición de etiquetar recursos para el desarrollo rural del Distrito Federal.

Asimismo, dijo que una exposición de este tipo ayudará a que los legisladores tomen conciencia de la actividad agrícola del DF y lo consideren en la discusión del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2008.

Su compañera de bancada, Aleida Alavez Ruiz indicó quedentro de las resoluciones obtenidas de la Mesa de Trabajo sobre Presupuesto 2008 para el Campo del Distrito Federal está el solicitar 450 millones de pesos para acciones rurales mediante el Ramo 8 del Programa Especial Concurrente, así como 800 millones para acciones de conservación de suelo y agua del Ramo 16.

Expresó que la situación del campo mexicano es consecuencia de su manejo y afecta los medios productivos y la calidad de vida de la sociedad, particularmente del DF, debido a que de su territorio el 59 por ciento se considera suelo de conservación.

Además, subrayó, constituye una zona rural de la que dependen 62 núcleos agrarios, 55 ejidos, siete comunidades y 36 poblados rurales conformados por 28 mil 600 hectáreas de tierras agrícolas, de las cuales 10 mil 154 son de uso urbano, 11 mil de pastizales, 500 de matorrales y 38 mil de bosques.

Por su parte, la doctora María Rosa Márquez Cabrera, Secretaria de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades del Distrito Federal, recalcó que para sustentar la petición de presupuesto era necesario mostrarle a los diputados los productos que se obtiene del campo del Distrito Federal, “de ahí la importancia de esta exposición”, agregó.

Enfatizó que a unos días de la apertura a importaciones libres de aranceles de maíz, frijol, caña de azúcar y leche en polvo, derivada del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN), las autoridades y legisladores deben estar comprometidos con los productores del campo y buscar la creación de un programa de rescate y protección de las plantas nativas de México.

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