·Sería una manera de auxiliar a pacientes que requieran transplantes

·Tan sólo por atender casos de insuficiencia renal hay presión económica en el IMSS, afirma el diputado Javier Calzada Vázquez

Ante la urgencia de dar atención a enfermos que sufren padecimientos crónico-degenerativos, como insuficiencia renal o cardiovascular, el diputado Javier Calzada Vázquez (PRD) propondrá que cadáveres de delincuentes sirvan para la donación de órganos.

Argumenta el legislador que esto podría aminorar la situación que se vive en hospitales públicos donde enfermos terminales tiene como único recurso de salvación el transplante.

Las enfermedades crónico-degenerativas, dice el diputado, requieren de diagnósticos especializados, además de tratamientos largos y complejos, por lo que sus costos están ejerciendo cada vez mayor presión en los gastos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Como ejemplo, en un escenario conservador, el gasto médico ambulatorio, farmacológico y de hospitalización de la insuficiencia renal, enfermedad clasificada en esta categoría, absorberá 5 mil millones de pesos en 2010, más de 10 mil mdp en 2020, y casi 25 mil mdp en 2040.

Así lo afirma en la exposición de motivos de una iniciativa que presentará ante el Pleno de la Cámara de Diputados, a fin de incrementar el número de trasplantes renales como solución “a este grave problema que se avecina para el IMSS”.

Para dar mayor claridad a esta realidad, agrega el legislador, se observa que durante 2007 los gastos médicos farmacológicos para pacientes con tratamiento por diabetes mellitus y por insuficiencia renal ascendieron a 693 y mil 152 millones de pesos, respectivamente.

Calzada Vázquez menciona que el gasto médico por concepto de hospitalización de estos dos padecimientos crónico-degenerativos ascendió a 6 mil 555 y 4 mil 269 millones de pesos durante el año de referencia.

“Estas cifras permiten calcular que únicamente por concepto de tratamiento farmacológico, cada paciente de insuficiencia renal le cuesta al IMSS más de 113 mil pesos anuales”.

Debido a que esta enfermedad es una de las consecuencias más graves de la diabetes mellitas, se incrementarán “notablemente” los gastos médicos asociados a la atención de casos de insuficiencia renal, subraya el diputado.

Afirma que la solución consiste en incrementar el número de trasplantes renales ya que en los aspectos técnicos y científicos para estas acciones ya no constituyen un problema en la actualidad.

Francisco Javier Calzada considera que el verdadero problema radica en la muy limitada oferta de órganos para trasplantes debido al reducido número de donadores conforme a las disposiciones legales, en contraposición a una demanda cada vez más creciente.

Expone que de acuerdo con cifras del Centro Nacional de Trasplantes a la fecha hay más de 10 mil 920 pacientes en espera de un órgano o tejido, de ese universo 5 mil 195 demanda un riñón y 5 mil 275 están en espera de córneas.

En suma, la creciente demanda de órganos y tejidos para trasplantes no está siendo cubierta, ni podrá serlo en el corto plazo, debido a una escasa oferta, a menos que se tomen cartas en el asunto, destaca el diputado.

Por eso propondrá que sean sujetos de donación de órganos y tejidos los cadáveres de las personas que fallezcan como resultado de su participación en actividades de la delincuencia organizada, mediante una adición al Artículo 324 de la Ley General de Salud, entre otras disposiciones.

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