• Evitaría abusos en cobros
• Hay 66 millones de usuarios en México

Debido a que en México los impuestos en los servicios de telefonía celular son altos, el diputado José Edmundo Ramírez Martínez propondrá reformas a la Ley Federal de Telecomunicaciones, para que las compañías de telefonía móvil dejen de fijar libremente sus tarifas y éstas sean establecidas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

El secretario de la Comisión de Población, Fronteras y Asuntos Migratorios señala que los usuarios de telefonía celular en México superan los 66 millones, mientras que la fija apenas rebasa los 20 millones de líneas, lo cual significa que de cada mil mexicanos 565 tiene un teléfono celular.

A través de una iniciativa que reforma el artículo 60 de la Ley Federal de Telecomunicaciones menciona que la autoridad debe establecer una tarifa que vaya de acuerdo con la economía de la población y garantice competitividad, seguridad y permanencia, así como servicios de calidad.

En ella, se pronuncia por evitar que los usuarios padezcan de los abusos constantes por parte de las compañías de telefonía celular que operan en el país. “El éxito de la telefonía celular no tiene que ser excesivamente costosa, sino todo lo contrario”.

Ramírez Martínez precisa que durante los últimos años esta telefonía pasó de ser un servicio elitista y disponible para los grupos de alto poder adquisitivo a un servicio de primera necesidad para cualquier persona que desee comunicarse rápidamente.

Indica que la política de un enfoque más beneficioso respecto a la baja en los costos de las tarifas celulares es la ruta más apropiada, ya que con esto se lograrían grandes beneficios para las clases más desprotegidas que utilizan el servicio no como un lujo sino como una necesidad.

Pese a los beneficios por el desarrollo de la telefonía celular, destaca, resulta discordante que el país se encuentre en los últimos lugares de los países pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) respecto a los costos de sus tarifas.

Un ejemplo, resalta, es el cargo de roaming, pues si bien permite una comunicación inmediata y sin necesidad de hacer trámites adicionales o alguna configuración al equipo, el costo de transferencia de cada conferencia telefónica y el de interconexión, “en pocas palabras, parece un robo”.

Abunda que mientras en otras regiones del mundo las compañías celulares eliminan costos extras y largas distancias, incluso entre países, realizan ofertas y brindan estímulos, en México los costos son exageradamente elevados.

De ahí, manifiesta la importancia de que sea el Ejecutivo federal, a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la autoridad que establezca una tarifa que vaya de acuerdo con la economía de la población.

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