Es necesario que las centrales de abasto y sus agremiados cuenten con un régimen fiscal especial que les permita cumplir con sus obligaciones tributarias y recuperar la seguridad jurídica para impulsar la modernización y competitividad del sector.

Así lo afirmó el diputado Ernesto Oviedo Oviedo (PAN), secretario de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados, al inaugurar el Primer Foro Fiscal de la Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto (Conacca) 2008, en el que se abordó el tema de las facilidades fiscales que deben tener las centrales de abasto.

En el evento, el legislador por Guanajuato señaló que los comerciantes se han descapitalizado debido a que Hacienda no realiza oportunamente la devolución correspondiente a las deducciones de impuestos como el Especial de Tasa Única.

Informó que entre 70 y 75 por ciento del sector se maneja con auto-facturación, por lo que rechazó que este mecanismo se cambie en 2009 por la factura electrónica. “Eso hará que muchos comerciantes que sí pagan impuestos pasen a la informalidad, que actualmente es de entre 10 y 12 por ciento”.

“El problema es meternos al primer mundo con estas acciones; en el caso de México no puede ser así porque estoy de acuerdo en que hay que impulsar el desarrollo y avanzar, pero primero se debe capacitar y ver si dará resultados”.

Dijo que las centrales de abasto manejan entre 70 y 75 por ciento de la producción en el país, mientras las cadenas comerciales trabajan entre el 12 y el 14 por ciento.

Otro problema que enfrentan los comerciantes en México, indicó, es que las cadenas de autoservicio venden los productos por debajo del precio de producción, “eso va a acabar a nuestros productores y no podemos permitirlo”, porque además genera un desequilibrio en el control de precios.

De ahí la necesidad de contar con apoyos gubernamentales, financiamiento y facilidades fiscales para quienes se dedican a esta actividad.

Asimismo, afirmó que la crisis alimentaria mundial representa una oportunidad para México, por lo que es necesario que el gobierno facilite la exportación y atraiga la tecnología y las divisas que tanta falta hacen en el campo.

Destacó que México puede producir sus alimentos y exportar los excedentes, pero es necesario que haya planeación. Primero se debe asegurar la alimentación interna y, posteriormente, exportar los excedentes a cualquier parte del mundo, no siempre pensando en Estados Unidos. El TLCAN no es impedimento para ello, dijo, se tienen contratos comerciales con Centroamérica, Japón y Europa.

En su oportunidad, Alfredo Neme Martínez, presidente de la Conacca, propuso implementar un régimen fiscal para los comerciantes de centros de abasto, que permita pagar impuestos de manera sencilla y equitativa.

Destacó que las centrales de abasto son fundamentales para el campo, ya que por su cadena comercial circula el 70 por ciento de la producción agrícola nacional.

Explicó que 80 por ciento de los proveedores, pequeños o medianos agricultores, no están en el Registro Federal de Contribuyentes, por lo que no entregan facturas y comprobantes de ingresos, lo cual dificulta la deducción de impuestos.

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