• Los medios no hemos sabido cómo actuar, aseveró la diputada
• Se conmemoró el quinto aniversario luctuoso de Don Federico Barrera Fuentes

El crimen organizado “nos ha tomado por sorpresa a todos y, tanto el Gobierno, como el Congreso y los medios, no hemos sabido cómo actuar, ni cómo evitar convertirnos los periodistas en voceros involuntarios del narcotráfico”.

Afirmó lo anterior la diputada María Beatriz Pagés Llergo Rebollar (PRI), al recordar el quinto aniversario luctuoso de don Federico Barrera Fuentes.

Cuestionó si, ante la guerra que enfrenta el Estado contra la delincuencia organizada, los periodistas, los medios de comunicación y el Congreso no deberían formar parte de ella y tener una responsabilidad específica qué cumplir en este combate.

Esta guerra, dijo, como todas, tiene dos frentes: el militar y el mediático, y “México, lamentablemente, está perdiendo en los dos frentes, sobre todo en el mediático, que es la que tiene más influencia sobre la conciencia de la sociedad”, subrayó.

Señaló la importancia de capacitar a los medios de comunicación para estar preparados frente a esta “guerra sui géneris que domina todos los espacios; tan es así que ya hablamos de una cultura del narcotráfico que nos ha contaminado a todos: a niños, a jóvenes, pero también a nosotros, incluso, en el lenguaje mismo”.

Añadió que en una época en la cual los cárteles utilizan a la prensa para difundir sus narcomantas, el periodismo show business empieza a tener serios efectos sobre la democracia, pues se publica, sin filtros ni matices, el contenido de esos mensajes, y “le damos a esas organizaciones una autoridad moral que no merecen tener”, puntualizó.

En el evento, realizado en la Sala de Prensa que lleva el nombre del periodista coahuilense, en el Palacio Legislativo de San Lázaro, Pagés Llergo destacó que el modelo de información actual “le viene como anillo al dedo a la delincuencia”.

Al exhibir en la pantalla televisiva las imágenes de descuartizados y decapitados, al abrir noticieros radiofónicos para contar la cantidad de muertos que hay a lo largo y ancho del país, “cuando con un estilo de información absolutamente arbitrario le damos tanto espacio a ese tipo de información, habría que preguntarnos si con ello no le estamos colocando cada vez más medallas a la delincuencia”.

Dijo que se ha acostumbrado al lector y al espectador al morbo, a los titulares espectaculares, a los noticieros con imágenes impactantes “queremos muertos, sangre, atentados para tener pretexto de colocarlo en primeras planas y vender el ejemplar”

Señaló que hablar en programas cómicos con el lenguaje del narco es terrible, “hemos perdido la capacidad de sorpresa y de indignación, por eso es imprescindible iniciar un debate en el que participemos los medios y otros integrantes de la sociedad”.

Añadió que los delincuentes quieren aparecer en las pantallas de televisión, en las fotografías y las primeras planas para ganar poder y ‘prestigio’, “no sólo buscan nichos de mercado para vender droga, sino espacios políticos y sociales a través de los medios”.

Dijo que la crisis de la prensa escrita, “no sólo es financiera, sino de lectores, y la razón es simple: la imagen terminó por devorar a las letras, el periodismo se ha convertido en una especie de show business”.
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