Para que el Ejecutivo Federal, en el marco de la participación de México en el Consejo de Seguridad y en la Asamblea General de la ONU, promueva la inclusión de los grupos criminales que participan en actividades de delincuencia organizada en el padrón de organizaciones terroristas formulado por las Naciones Unidas, diputados del PRD, presentarán un punto de acuerdo.

El objetivo es que se utilicen todos los mecanismos institucionales en el derecho internacional, incluyendo convenios y tratados, contra el terrorismo, para combatir a las organizaciones criminales mexicanas que cometen este tipo de actos.

El documento impulsado por los legisladores Cuauhtémoc Sandoval Ramírez, Raymundo Cárdenas Hernández, José Alfonso Suárez del Real y Aguilera y José Jacques y Medina, precisa que México se sitúa en el quinto lugar con más delincuencia organizada en el mundo.

Añade que las mafias mexicanas tienen conexión con otras que operan en 47 naciones.

Menciona que los nuevos enemigos del Estado, llámense traficantes de estupefacientes, de armas, tratantes de seres humanos, extorsionadores, secuestradores, contrabandistas, perpetran matanzas por doquier, ya sea en Chihuahua, Mérida, Morelia, Tijuana o Ciudad Juárez.

Se trata, indica, que las organizaciones criminales mexicanas que han utilizado el terror como método de acción se equiparen con otras organizaciones terroristas mundiales y, de esta forma, la comunidad internacional emprenda una lucha frontal contra éstas, buscando no sólo congelar sus bienes y recursos, sino aislándolas de su entorno.

“El Estado mexicano, para hacer frente a la delincuencia organizada, debe hacer uso de la cooperación internacional como una vía adecuada que contribuya a combatir a estos criminales”, enfatiza.

El documento publicado en la Gaceta Parlamentaria indica que “la creación de controles patrimoniales en México, a través de unidades de investigación en cada entidad federativa, sigue siendo una agenda pendiente y una condición necesaria para introducir medidas que frenen el proceso de infiltración, corrupción y posterior feudalización en los gobiernos estatales y en el poder político federal”.

Diversos especialistas han señalado la necesidad de establecer vínculos institucionales a nivel internacional que garanticen una mayor cooperación en materia de combate a la delincuencia transnacional.

El marco multilateral puede otorgar al Estado mexicano mayores capacidades institucionales para combatir de manera eficaz las actividades ilícitas operadas por la delincuencia organizada, puntualiza.

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