La enorme cantidad de fórmulas lácteas extranjeras están dejando sin mercado la producción nacional, la cual no tiene garantías de colocación debido a la falta de políticas públicas que aseguren su venta, señaló el diputado Carlos Rodríguez Guevara, secretario de la Comisión de Desarrollo Social.

Las fórmulas lácteas han invadido los hogares mexicanos y también las escuelas, a través de instituciones como el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), que distribuye sustitutos de leche, advirtió.

Agregó que la producción de leche fresca ha dejado de ser una actividad estratégica a nivel nacional y ahora se sitúa en un punto de alto riesgo, debido a que en los últimos años se ha dado preferencia a la importación de leche en polvo, lactosueros y grasa vegetal.

Por ello, presentó un punto de acuerdo para que el Ejecutivo, a través de la Secretaría de Desarrollo Social, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y la empresa Industrializada Conasupo S.A. de C.V., den prioridad a la compra de leche de los empresarios nacionales.

El legislador aseguró que las prácticas monopólicas y desleales de los grandes corporativos lecheros tienen a los pequeños productores del ramo en una severa crisis, debido a que coartan su capacidad de venta.

Expresó que el Congreso debe intervenir a fin de lograr el bienestar de ese sector, para que sea competitivo, sustentable y socialmente equitativo.

Rodríguez Guevara recalcó que en los últimos años se ha registrado un déficit en la producción de leche; por un lado, la falta de infraestructura para almacenar y procesar los excedentes está propiciando la desaparición de los establos lecheros.

Enfatizó que mientras el consumo de la leche ha aumentado en años recientes, se ha perjudicado a los empresarios mexicanos por la importación de fórmulas lácteas, afectando severamente al sector nacional, lo que perjudica directamente la cadena productiva.

Abundó que dicho rompimiento en la cadena productiva ha provocado una grave inestabilidad, toda vez que al no poder colocar estos volúmenes de producción se afecta enormemente el precio de la leche y la consistencia de los productores agrícolas de alfalfa, granos y fertilizantes.

Ante este panorama, urgió al Congreso a exhortar a los gobiernos de los 31 estados y el Distrito Federal para que a través del DIF, estatales y municipales, y de los otros programas locales de compra de leche, se dé preferencia a la compra de leche de los productores nacionales.

En el punto de acuerdo, también suscrito por la diputada Martha Angélica Romo Jiménez y turnado a la Tercera Comisión, se destaca que algunas empresas financian su operación con agresivas prácticas comerciales, en donde compran a precios muy bajos, mientras que al vender los productos son significativamente elevados.

Precisa que la crisis de esa industria imposibilita a los pequeños y medianos productores a ofrecer precios competitivos, además de que las excesivas importaciones de leche en polvo, la comercialización de preparaciones con sueros y químicos, así como la liberación total del mercado internacional han mermado en el sector nacional.

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