Diputados del PRI y PAN fijaron sus posturas respecto del conflicto en la región del Evora en Mocorito, Sinaloa, debido a un desorden ecológico y sobreexplotación de los mantos acuíferos por empresas cribadoras (separación de partes menudas) al extraer material pétreo de su cauce.

El diputado Guadalupe Eduardo Robles Medina (PAN) recordó que en los alrededores del río Evora durante más de 25 años se han establecido empresas dedicadas a la extracción de piedra, misma que es aprovechada en la construcción.

Resaltó que la concesión para su instalación fue otorgada por la Comisión Nacional del Agua (CNA), una vez que la secretaría encargada de revisar el impacto ambiental entregara el visto bueno en aquellos años, “sin embargo al paso del tiempo esta situación generó un desorden ecológico”.

Se manifestó porque la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales reubiquen las empresas en áreas donde se deje de ocasionar daños al entorno ecológico.

Es urgente, dijo, poder seguir conservando el agua, ya que es un elemento vital y solicitó, de carácter urgente, la intervención de las dependencias a efecto de que se logre una solución inmediata al conflicto.

A su vez, el diputado Óscar Lara Salazar (PRI) sostuvo que el río Evora debe ser para todos los habitantes y no para unos solamente, y que lo más grave “es que se está ante un conflicto de violencia”.

Destacó que esa situación, presenta dos situaciones graves: una el ecocidio sobre una reserva ecológica que es muy importante para el municipio y la región centro de Sinaloa.

La segunda, la sobreexplotación, que afecta de manera tal los mantos acuíferos que ha provocado el desabasto para esta municipalidad y las comunidades circunvecinas. “Hay un estudio técnico científico donde se revela la gravedad del problema y propone la remoción inmediata de los cribadores a otro lugar”.

Puntualizó que desde la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales se está trabajando para que se canalicen 20 millones de pesos para restituir parte de esta reserva ecológica.

“Aquí se presenta una situación grave; los cribadores han manifestado su disposición para cambiarse a otro lugar y desempeñar su trabajo, sin embargo el delegado de la CNA en la entidad, ha asumido una actitud arbitraria e insensible”, abundó.

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