La Comisión Permanente del Congreso de la Unión, en el ámbito de la colaboración entre los poderes, emitió un pronunciamiento en apoyo al fortalecimiento de la seguridad pública en el país.

Asimismo, exhortó al titular del Ejecutivo federal a que en tal contexto y en cumplimiento del pacto federal, gire sus instrucciones al secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, para que mantenga comunicación abierta e intercambio de información con el Congreso.

La finalidad, precisó el diputado Héctor Guevara Ramírez, presidente de la Primera Comisión de Trabajo (Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia), es para hacer un seguimiento puntual de los resultados de la política de seguridad pública e impulsar mecanismos de deliberación y formación de consensos a fin de perfeccionar propuestas legislativas en materia de seguridad y para construir una auténtica política de Estado.

En tribuna, el legislador recordó que el pasado 21 de enero, el titular de Seguridad Pública compareció ante la Primera Comisión para dar a conocer los resultados de la Policía Federal; los índices delictivos; tipo de delitos y víctimas, además de que solicitó un mayor presupuesto para dignificar los salarios de los elementos de seguridad.

En relación con esa exposición, dijo, los legisladores observamos que el Congreso no debe ser ajeno ni indiferente a lo que ocurre. “No podemos esperar a que las cosas se resuelvan por sí solas o limitarnos únicamente a gestionar la crisis”.

Por responsabilidad política, abundó, por compromiso republicano y, sobre todo, “por amor a México, no podemos ser ajenos a los esfuerzos que desde las fuerzas armadas y policiales se realizan para pacificar las zonas convulsas”.

En este sentido, el diputado Guevara Ramírez exhortó al Pleno de la Permanente para que, sin distinción de color político, se apoye el esfuerzo de combate a la delincuencia y se complemente.

El escenario que se planteó en esa comparecencia, advirtió, está afectando la gobernabilidad, pues reduce los márgenes de consenso del Estado al ascender el reclamo social, la protesta y el malestar, mismos que afectan a las instituciones y a la población en general.

Concluyó que en aquella ocasión, el secretario de Seguridad Pública mencionó que nada es más peligroso para el Estado que el desapego y rechazo a los ciudadanos a las instituciones y a las políticas públicas referidas al orden. “Se estableció que no basta la voluntad política o burocrática, sino que es necesaria la eficacia en las acciones y una visión integral en esta coyuntura crítica”.

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