En la sesión, diputados del PRI, PAN, PRD, PVEM, PT, Nueva Alianza y Convergencia fijaron comentarios sobre la visita del gabinete de seguridad del gobierno de los Estados Unidos de América.

El diputado Alfonso Navarrete Prida (PRI) señaló que la respuesta policiaca ha sido insuficiente, ineficiente y potenciadora de violaciones a los derechos humanos y de violencia social exponiendo gravemente a las fuerzas armadas.

“Se ha señalado que existen herramientas con las que cuenta el Estado de carácter social que hacen más por la seguridad como son acciones de salud en el tema de adicciones; vigilancia en cápsula, es decir, bacheo de calles, alumbrado público, mejoramiento de espacios públicos; programas educativos y combate a la violencia intrafamiliar”.

Agregó que se tienen claros los grandes problemas regionales que requieren corresponsabilidad bilateral como lo son; migración y combate a las estructuras criminales, entre otros. “Estamos seguros que ése es el camino para poder resolver estos severos fenómenos sociales”.

Del mismo partido, el diputado Ernesto de Lucas Hopkins lamentó que el encuentro se haya dado pocos días después de los homicidios ocurridos en Cuidad de Juárez de las personas que colaboraban en el consulado de Estados Unidos y no antes.

Indicó que es imprescindible reforzar la relación bilateral entre México y Estados Unidos para enfrentar un fenómeno transfronterizo, como el que el tráfico de enervantes ha desarrollado en las últimas décadas.

Dado el alto nivel de la delegación que visitó nuestro país, agregó, es fundamental que esta legislatura sea informada en tiempo y forma, por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores y del gabinete de Seguridad, sobre las conclusiones, planes, objetivos, pero particularmente sobre los compromisos que tuvieron acuerdo.

Por Acción Nacional, el legislador Francisco Arturo Vega de Lamadrid argumentó que mejorar en términos de cooperación las relaciones bilaterales, es primordial en esta lucha que concierne a ambos países, “en la que vale provocar la misma conciliación de las posturas y el respeto a las soberanías”.

Dijo que destinar recursos para la protección de la frontera es algo que debería estar dentro de los planes presupuestales ordinarios de aquel país. “Ya era de escuchar, de la señora Hillary Clinton, la aceptación que en su país se tiene un grave y gran problema social derivado del consumo de sustancias ilícitas; que existe un grave problema del manejo de armas y explosivos”.

Es importante, añadió, que en el marco de la reunión bilateral también se encuentran declaraciones del presidente Obama a favor de impulsar una Reforma Migratoria en su país. “Los legisladores del PAN vemos con beneplácito tal intención, dado que en las últimas reuniones interparlamentarias desafortunadamente no se ha podido vislumbrar”.

En su intervención, el diputado Jesús Ramírez Rangel (PAN) comentó que falta mucho por hacer, “pero es un gran avance que el Gobierno de Estados Unidos reconozca su responsabilidad en cuanto a tráfico de armas a nuestro país, el alto consumo de drogas en su país y el movimiento de dinero en efectivo hacia el territorio nacional”.
Enfatizó: “pero también falta que nosotros sigamos haciendo nuestra parte, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, urge apurar nuestra reforma de justicia a nivel federal y exigir corresponsabilidad en los gobiernos estatales en cuanto a la reforma de las instituciones de justicia, pasar de instituciones de justicia propias del autoritarismo a instituciones de justicia democrática que respeten los derechos humanos, atiendan la prevención y den prioridad a la transparencia”.

El diputado José de Jesús Zambrano Grijalva (PRD) puntualizó que el Congreso de la Unión debe conocer cuál es el alcance real de los acuerdos y el contenido de los mismos; qué significan estos programas pilotos que se van a establecer en las zonas fronterizas; hasta dónde es la responsabilidad de Estados Unidos para evitar el tráfico de armas, pues el 93 por ciento de las incautadas a los narcotraficantes en México, son de procedencia de ese país.

Se requiere, afirmó, la colaboración más no subordinación de México hacia Estados Unidos, así como corresponsabilidad; necesitamos establecer un plazo claro para el regreso de los militares a los cuarteles, pero a partir de un replanteamiento de la estrategia de manera integral para combatir eficazmente el crimen organizado.

Reconoció que si no se plantea un gran acuerdo nacional del que participen los tres poderes de la Unión, los sectores productivos y los sociales del país, México seguirá en plena descomposición, por lo que solicitó la comparecencia de los funcionarios de gabinete que asistió a la reunión con el gabinete de seguridad del gobierno de los Estados Unidos.

El diputado Marcos Carlos Cruz Martínez (PRD) subrayó que la iniciativa Mérida ha fracasado y que sus consecuencias son insatisfactorias para los mexicanos. “Nuestro país ha cargado con los costos a cambio de una actitud poco cooperativa del vecino del norte”.

Añadió que EU no ha cumplido su parte de disminuir el consumo de drogas en su población, “por el contrario la demanda de enervantes sigue aumentando de manera exponencial y tampoco ha cumplido en evitar el tráfico ilegal de armas, por lo que se han fortalecido los cárteles criminales”.

A su vez, el diputado Pablo Escudero Morales (PVEM) cuestionó el por qué no se realizó la reunión antes, cuando en lo que va del sexenio son más 18 mil muertos, ya que aquella nación es el primer consumidor en el mundo, pues se estima que actualmente E.U tiene 15 millones de adictos activos.

La conclusión, abundó, es que fue una reunión con fines cosméticos y fotográficos; en la que no existieron compromisos reales y serios; una reunión de palabra y buenas intenciones, es decir una simulación.

Pidió crear una estrategia binacional de seguridad y de colaboración de ambas naciones. “Ojalá se retome el rumbo en el país de las cosas importantes, pues cada vez son más frecuentes las violaciones a los derechos humanos y los asesinatos a los inocentes”.

Por su parte, el diputado Alberto Cinta Martínez, del PVEM, consideró en el combate al narcotráfico, es importante que el gobierno mexicano entienda que se ha estado en una estrategia equivocada que ha costado millones de pesos, miles de vidas y que no ha dado resultados. “De los narcotraficantes que son capturados, el 75 por ciento terminan siendo liberados”.

El PVEM propone una verdadera estrategia contra el lavado de dinero, un mejor uso estratégico de las fuerzas armadas, cierre y control de fronteras al dinero y armas, y una mejor educación para acabar con el problema de la demanda.

Del PT, el diputado Juan Enrique Ibarra Pedroza resaltó que en aquel país sería impensable involucrar a los militares en actividades relacionadas con el narcotráfico. Por ello, es incongruente e inaceptable que hoy se plantee una colaboración más cercana entre los sectores militares de ambos países. “Una militarización transnacional tendría consecuencias trágicas para la ciudadanía, el Estado de derecho y para la debilitada institucionalidad”.
La lucha contra el narcotráfico, dijo, ya ha dejado más de 19 mil muertes, múltiples violaciones a los derechos humanos en lo que va del actual sexenio, y que tan sólo en el primer trimestre de 2010 van dos mil 600 ejecutados.

Consideró necesario un acuerdo que incluya una profunda Reforma Migratoria; un concepto de seguridad integral con compromisos de política interna en Estados Unidos, en control de armas y tráfico, así como la revisión del Tratado de Libre Comercio.

El diputado Porfirio Muñoz Ledo (PT) resaltó que ha llegado la hora de un replanteamiento global de la estrategia de combate al narcotráfico, combatir en lo sustancial el origen de este fenómeno a través de la educación, el empleo, incremento de salarios y la formalización de la economía.

“Se debe debatir el tema de la legalización de la droga, un compromiso serio, no aumentar, a través del Plan Mérida la militarización del país que conduce a un permanente estado de excepción. Yo invito a tener un debate sobre la estrategia general en América del Norte y con el resto del mundo”, dijo.

El legislador Gerardo del Mazo Morales (Nueva Alianza) precisó que la reunión de alto nivel entre funcionarios de Estados Unidos y México representa una invaluable oportunidad para consolidar una estrategia de cooperación entre las dos naciones para enfrentar al crimen organizado.

Ratificó el apoyo de su partido a las fuerzas armadas, ya que su presencia en las calles ha logrado reducir el margen de acción del crimen organizado, “esto, sin duda, muestra la voluntad y la decisión del Estado por enfrentar un problema que pone en riesgo la salud y la seguridad de la sociedad, aunque sucesos como los de Nuevo León muestra que es urgente revisarla”.

Es necesario, agregó, que se impulsen acciones que fortalezcan las instituciones y reconstruyan el tejido social lastimado por la crisis económica, el desempleo y la violencia, “estaremos dejando el problema de fondo sin resolver; nos corresponde impulsar desde el Poder Legislativo una estrategia de cooperación entre México y Estados Unidos ante un problema que es común”.

La diputada Elsa Martínez Peña (Nueva Alianza) señaló que el esquema de seguridad pública debe ser replanteado, es necesario reforzar las acciones en materia de capacitación y equipamiento para los cuerpos de seguridad, por ello es forzoso operar de manera conjunta y coordinada para lograr resultados satisfactorios que conlleven a la desarticulación de las organizaciones delictivas.

“Estamos convencidos de que las policías mexicanas se deben modificar, debemos avanzar a la creación de una policía única para que las táctica, planes y programas culminen con la misión. La prevención del delito debe prevalecer más que la represión del mismo, una de las formas de persuadir al crimen organizado es a través de la educación”, puntualizó.

Por Convergencia, la diputada María Teresa Rosaura Ochoa Mejía dijo que abordar el tema de la seguridad nacional en una agenda que contemple compromisos de ambos países, con metas medibles y plazos para su concreción puede dar paso a prácticas de simulación que en nada contribuyen a solucionar los graves problemas que enfrenta el Estado mexicano en materia de seguridad pública.

Lo más preocupante, expresó, es el ingreso de armas a nuestro país, pues se han hecho grandes decomisos últimamente y, sin embargo, sigue presentándose constantemente; “se ha señalado con mucha razón que un componente de la crisis de seguridad que enfrenta nuestro país se origina con el consumo inmoderado de sustancias prohibidas en los Estados Unidos, así como el contrabando”.

Se manifestó porque existan acuerdos, metas y objetivos claros; buena voluntad de colaboración, no de intervencionismo y sí de solución a estos graves problemas. “No más armas que ingresen a este país; no más droga que siga distribuyéndose entre los menores, pero sí una mejor colaboración para la solución de estos problemas”.

El diputado Pedro Jiménez León (Convergencia) refirió que el crimen organizado ha aumentado su capacidad de trasiego de drogas, aumentado el número de jóvenes adictos en EU y México, el ingreso de armamento de EU hacia México y los grupos del crimen organizado son más poderosos.

“Nos queda claro que toda la estrategia ha sido equivocada, si educamos y evitamos que los jóvenes se vuelvan consumidores ocasionales y adictos es la mejor manera para combatir al narcotráfico. Hay que poner la inteligencia financiera, policiaca y de seguridad”, finalizó.

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