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Boletín N°. 1822 La Cédula de Identidad debe ser proyecto de Estado y no de gobierno en turno: Canek Vázquez

• Desconfianza de la población ha frenado el proyecto: Gómez Mont

• Credencial para votar tiene que ser único instrumento de identificación: Valdés Zurita

Este martes quedó formalmente instalado el Grupo Plural de Trabajo que dará Seguimiento al Proyecto de la Cédula de Identidad Ciudadana. Durante la ceremonia, su presidente, Canek Vázquez Góngora (PRI) demandó que la Cédula sea parte de un proyecto de Estado y no únicamente “de un gobierno en turno”.

“Todos estamos a favor de un documento de identidad jurídica que sea único e infalsificable; de un documento que sea de utilidad para el gobierno y que, al mismo tiempo, no genere desconfianza ni suspicacias entre la población. Lo que se le reprochó al Ejecutivo Federal fue la improvisación, la premura y los alcances excesivos de la versión original de su proyecto”, dijo.

Vázquez Góngora indicó que otro de los objetivos es impulsar decididamente las reformas que sean necesarias para suministrarle al Estado un mejor marco normativo y operativo, a fin de acreditar la personalidad de todos los individuos, sin merma alguna de sus derechos civiles.

“Evitaremos que las y los habitantes de México se sientan amenazados o desprotegidos ante una excesiva intromisión de las autoridades públicas en su vida privada. No queremos un Estado incompetente ni una población amenazada”, argumentó el diputado priista”.

Asimismo, explicó que la labor del grupo de trabajo será fundamental para depurar el proyecto de la Cédula de Identidad, anunciado por el Ejecutivo Federal en julio de 2009 y que, por sus carencias, fue objeto de múltiples críticas y exhortos por parte de varios actores políticos y sociales.

“Este grupo plural, que funcionará hasta el 2012, tendrá un espíritu positivo y propositivo. Queremos las mejores ideas de todos los sectores sociales para concretar un proyecto toral para toda la nación en las próximas generaciones. Para ello, convocaremos a todas las voces calificadas como son los Poderes de la Unión; partidos políticos; grupos parlamentarios; organismos públicos autónomos; especialistas y organizaciones civiles. Todas las voces serán bienvenidas y escuchadas”.

Por su parte, el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, destacó que el gobierno federal está dispuesto a hacer un análisis sereno y a ser flexible para cumplir con el reto que implica la Cédula de Identidad Ciudadana.

Aceptó que el hecho de que la cédula como tal no haya podido culminar en dos décadas, se debe entre otras cosas, por registros como el electoral y la desconfianza de la población hacia la propia Secretaría de Gobernación en torno a cómo debe ser la identificación de cada una de las personas.

Los mexicanos, señaló el funcionario, necesitamos profundizar en nuestra identidad, tener un respaldo público que determine quiénes somos y quiénes no somos. “México necesita un organismo capaz de generar credibilidad y confianza y que pueda proteger la privacidad de las personas.

En este sentido, propuso la creación de un Instituto Nacional de Identidad la cual, su autonomía esté resguardada por la pluralidad política de quien lo determine y en ese sentido sea una garantía para que la base de datos no pueda ser materia de abuso por nadie y que al mismo tiempo responda a los diversos fines a los que está convocada, entre otros a los de la seguridad.

Reiteró la disposición del gobierno federal para seguir cumpliendo con sus obligaciones en el tema de la Cédula de Identidad, además de estar abierto a que el marco de obligaciones sea reformado de una manera seria por parte de los legisladores.

A su vez, el consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE) Leonardo Valdés Zurita, dijo que el grupo plural de trabajo tendrá la responsabilidad de analizar las posibles reformas legislativas para que el Estado instrumente una política pública en materia de identidad. “Estoy seguro que el producto de sus trabajos permitirá fortalecer nuestras instituciones y también nuestra democracia”.

En julio de 2009, refirió, el anuncio de la creación de la Cédula de Identidad generó inquietud entre los electores, la opinión pública entre los partidos e incluso en el Consejo General del Instituto Federal Electoral.

Recordó que el IFE estuvo atento a todos los planteamientos e integró el tema de la Cédula de Identidad en sus deliberaciones institucionales para encontrar alternativas de defensa del padrón y de la credencial para votar.

“Por ello, los consejeros electorales determinamos por consenso tres aspectos básicos: que el padrón continúe siendo administrado exclusivamente por el IFE; que la credencial para votar sea el instrumento único de identidad producido y puesto a disposición de la ciudadanía por el IFE y que este documento garantice el pleno ejercicio del derecho al voto de los ciudadanos mexicanos”.

En ese marco, abundó, el Consejo General conocerá en breve un documento que posteriormente se someterá a la consideración del grupo plural de trabajo en torno al derecho a la identidad y el ejercicio del voto.

“Estamos a casi 14 meses de las elecciones de 2012 y el IFE ha iniciado la preparación del proceso para que sea ejemplar. Queremos que uno de los principales resultados sea la consolidación de la democracia. Nuestro objetivo es organizar una elección con cero dudas”.

Concluyó que a casi un año de iniciado el debate sobre la Cédula de Identidad, la credencial para votar tiene mayor respaldo social del que tenía en julio de 2009. “Estamos a tiempo de que se impulsen los acuerdos necesarios para que el padrón electoral sea un factor de certeza en las próximas elecciones presidenciales y que la identidad de los ciudadanos sea un elemento más que acompañe la consolidación de la nuestra democracia”.

Al fijar el posicionamiento de su grupo parlamentario, la diputada Claudia Ruiz Massieu Salinas indicó que el PRI comparte el interés de instrumentar y consolidar una política integral del manejo de la población y la creación de un instrumento que permita la plena identidad jurídica de los mexicanos, sin embargo, “creemos que es pertinente continuar con la reflexión en torno a este proyecto”.
Dijo que los esfuerzos deben estar encaminados a construir un sistema con una visión integral, además de rescatar y dar continuidad a aquellos elementos y componentes institucionales que han estado vigentes y que han dado resultado.
“En el PRI nos resulta poco pertinente retomar un proyecto concebido hace dos décadas y que no tome en cuenta elementos y condiciones que se han dado a lo largo de ese tiempo. Se han creado instituciones, y en particular, el IFE ha tenido responsabilidades importantes en la construcción de la credencial para votar con fotografía, que de facto es la identificación oficial más utilizada por los mexicanos”.
En este sentido, se pronunció por esperar una colaboración mucho más estrecha entre el IFE y la Secretaría de Gobernación y no partir “de un mero convenido de colaboración interinstitucional de alcances limitados”.
Por ello, anticipó: “serán necesarias reformas a por lo menos tres ordenamientos jurídicos: la Ley General de Población, la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, y de ser necesario, realizar reformas constitucionales”.
En su oportunidad, el diputado Agustín Castilla Marroquín (PAN) manifestó que la instalación del grupo de trabajo resultará trascendental para resolver un tema que se ha pospuesto de manera indefinida a lo largo de muchos años.
“Existen, como ha quedado de manifiesto tanto en esta Cámara como en las sesiones del Consejo General, visiones distintas, pero hay que recordar que estamos ante una obligación constitucional y legal que tenemos que cumplir”.
Agregó que la exigencia de la ciudadanía es que existan acuerdos y en ese sentido “habrá que conciliar la creación de la Cedula de Identidad Ciudadana con la credencial para votar, que ha sido desde luego un instrumento muy importante de identificación”.
Castilla Marroquín concluyó que es necesario atender de manera urgente el registro de niñas, niños y adolescentes que en este momento se encuentran en una situación de vulnerabilidad. “Máxime cuando hemos podido constatar que cada vez más son reclutados por el crimen organizado o son víctimas de la explotación sexual- comercial infantil”.

El diputado Pablo Escudero Morales, del PVEM, señaló que para su partido, la Cédula de Identidad Ciudadana es un tema muy importante y delicado. Destacó que desde hace meses, han exhortado al IFE y a la Secretaría de Gobernación a entablar el diálogo, además de sugerir la creación del grupo de trabajo que hoy se materializa.

“Desde un inicio señalamos las inconsistencias jurídicas que el proyecto de la Cédula de Identidad tenía; todas relacionadas con la legalidad. Aunado a ello, se manifiesta nuestra objeción de que la Secretaría de Gobernación sea quien resguarde los datos personales de todos los mexicanos. Es indispensable que trabajemos todos juntos para buscar el camino para la creación de un instituto autónomo”.

En este sentido, se manifestó por reflexionar “seriamente y de fondo” todos los asuntos relacionados con la cédula, incluso la posible violación a los derechos humanos vinculada a la obtención de los datos biométricos y a la certeza e identidad jurídica de los menores de edad.

Concluyó que la necesidad de pagar cientos de millones de pesos para equipos altamente sofisticados se pone en tela de juicio. “El tema es tan serio que debemos hacer un alto en el camino para construir los acuerdos necesarios mediante el diálogo, la discusión y la aprobación de reformas”.

En tanto, la diputada Teresa Guadalupe Reyes Sahagún, del grupo parlamentario del PT, indicó que el tema de la Cédula de Identidad ha generado muchas dudas en la Cámara de Diputados e incluso entre la ciudadanía.

Consideró que conforme se ha planteado el tema de la Cédula de Identidad es sumamente peligroso que esté controlado por la Secretaría de Gobernación, sobre todo, en términos de la seguridad nacional, de la impunidad, la falta de justicia y de certeza.

“Muchos diputados hemos planteado la necesidad de que se discuta abiertamente para qué se quiere una Cédula de Identidad; si es para construir una base de datos infalible para usos más allá de su objetivo o si es pensando en el 2012. Para todos nosotros es inaceptable”.

Finalmente, el senador Jesús Murillo Karam (PRI) aseguró que no estamos hablando de una credencial que identifique a los ciudadanos. Estamos hablando de un sistema nacional de identidad fundamental en este siglo que nos obliga a un trabajo de fondo y profundo”.

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