En el marco del 150 aniversario de la promulgación de la Ley de Libertad de Culto, diputados del PRI, PAN, PRD, PVEM, PT, Nueva Alianza y Convergencia señalaron la importancia que ha tenido para la vida del país al establecer la libertad de creencia y construir una nación más moderna y civilizada.

El diputado Emilio Chuayffet Chemor (PRI) indicó que la historia de la libertad de cultos en México revela en buena medida la evolución política de México, toda vez que la ley postula la libertad de creencias, invirtiendo los términos para decir que lo herético es querer obligar a alguien a compartir la búsqueda del absoluto en el que cada cual pueda creer.

Mencionó que desde la promulgación de la ley, la Iglesia está sujeta al Estado en todos aquellos actos que tengan que ver con la sociedad civil; con arreglo a la teoría de la soberanía, el Estado se seculariza y no interfiere en las actividades estrictamente religiosas.

La historia de la libertad de creencias, añadió, ofrece una fecunda enseñanza: libertad de culto y Estado laico son dos caras de la misma moneda. “Aquélla es un derecho fundamental del ser humano, inalienable e imprescriptible. Éste es una garantía de respeto a todos los credos e incluso a la libertad de no creer”.

La diputada Adriana de Lourdes Hinojosa Céspedes (PAN) expresó que hoy se proclama la libertad de cultos como una libertad fundamental que debe garantizarse y salvaguardarse. “Este es uno de los actos que han defendido con toda precisión el carácter republicano, laico y libre de la nación mexicana”.

Abundó que con la promulgación de la Ley, expedida el 4 de diciembre de 1860 por el presidente Benito Juárez, se reafirma que el Estado mexicano tiene carácter laico; que debe existir una plena libertad religiosa, que todos los poderes y funcionarios del Estado deben, no sólo respetar, sino garantizar.

Se pronunció en contra de cualquier pretexto o argumentación que sirva al Estado para entrometerse en cuestiones relativas a las libertades espirituales. “Creemos que la convivencia democrática y moderna debe fundarse en el respeto que debe tener el Estado, los partidos políticos y todos los grupos sociales a los derechos de toda persona”.

Del PRD, el diputado Rodolfo Lara Lagunas dijo que con la libertad de cultos se garantiza el respeto a cualquier religión y a la autonomía de conciencia; además se reafirma el principio de laicidad del Estado mexicano, “pese a que de vez en cuando las fuerzas conservadoras queman libros y promueven acciones que limitan las libertades de los ciudadanos, en esencia las instituciones juaristas siguen vivas”.

Expuso que hoy la mayoría de la población tiene claro que es mejor un Estado laico que uno confesional; que la libertad de conciencia y de cultos hace de México un país moderno y civilizado. “Tenemos que reconocer la visión de estadista del presidente Juárez y la grandeza de los liberales mexicanos”.

Hoy, precisó, ante esta ofensiva oligárquica en contra de los trabajadores, de los mineros; de la pobreza generalizada, del desempleo creciente, de la represión, de la presencia de policías norteamericanos en nuestro territorio, una mirada hacia el reformador Juárez alienta y estimula para seguir luchando en contra de los abusos, atropellos, privilegios de la oligarquía nacional y extranjera.

La diputada Rosario Brindis Álvarez (PVEM) mencionó que el tema de la libertad de culto en México no puede estar escrito con letras minúsculas, cuando el país ha firmado tratados internacionales en donde se compromete a respetar las creencias de todos los mexicanos, incluso de aquellos que han decidido no practicar alguna.

Puntualizó que este documento ha representado un parteaguas para toda la nación en materia no sólo de culto público, sino de respeto a la pluralidad, a la libertad de conciencia, al reconocimiento de una ideología que pretendió hacer de los templos los únicos centros educativos y de solvencia moral para los mexicanos.

“México no puede volver a ser una nación intolerante en materia religiosa, sino un país en donde convivan todas aquellas creencias que no vulneran los derechos ni atentan contra las garantías colectivas de los mexicanos. Somos un país que prefiere la laicidad antes que regresar a una cultura impositiva, totalitaria, discriminatoria y marginal”.

Por el PT, Teresa Guadalupe Reyes Sahagún indicó que el Estado laico representa a la fecha el verdadero motor del equilibrio político y social, el auténtico constructor de la democracia tangible y cotidiana, y el momento de su aplicación con las leyes juaristas representó la verdadera consumación de la Independencia.

Conmemorar los 150 años del Estado laico en México, agregó, significa la defensa de uno de los pilares fundamentales de la República.
Lo anterior, “frente al asedio frívolo y reaccionario de los idólatras del neoliberalismo, postcristeros, sinarquistas, Legionarios de Cristo y yunquistas, quienes desde su gobierno ilegítimo promueven la inequidad económica, el desequilibrio político, la violencia desenfrenada, el dolor humano y el intervencionismo”.

El diputado Víctor Hugo Círigo Vásquez (Convergencia) precisó que la libertad de cultos ha dejado una profunda enseñanza que los mexicanos no podemos dejar pasar inadvertida, pues corresponde a las iglesias desarrollar, sí, un trabajo pastoral, pero acorde a lo establecido en la Carta Magna y en las leyes que de ella emanan, sin acudir al viejo expediente e intervenir en otro tipo de asuntos que corresponden a las autoridades civiles.

Denunció que son notorios los casos de altos prelados de la Iglesia católica que, contando por lo menos con la omisión o inacción de las áreas correspondientes del gobierno Federal, formulan argumentaciones, anatemas y diatribas en contra de autoridades civiles propias de siglos pasados, con una enorme estela de atraso y de equívocos en su pretensión de recuperar viejos privilegios que no tienen ninguna razón de ser.

Hizo un llamado a la Secretaría de Gobernación para aplicar la Ley de Cultos. “Convergencia expresa su más firme rechazo a estos intentos que pretenden retornar a cuestiones históricas ya rebasadas. Necesitamos mantener el clima de libertades que para los ciudadanos se han ido construyendo”.

De Nueva Alianza, Roberto Pérez de Alva Blanco expresó que esta ley modernizó a México y reconoció derechos obstinados. Además de que la importancia de los postulados juaristas de libertad de culto, hoy más que nunca deben garantizarse, sobre todo cuando la voz de la intolerancia se ha venido manifestando sistemáticamente en distintas partes del mundo y del país.

Conmemorar este aniversario, dijo, convoca a respetar y a hacer valer cada vez más la plena tolerancia religiosa, la libertad de conciencia y, muy especialmente, a fortalecer la educación laica más allá de las preferencias políticas o religiosas para contribuir en la laicidad del Estado mexicano de acuerdo a la armonización de sus principios esenciales.

Se manifestó por el respeto pleno a la libertad de conciencia, autonomía política y de la sociedad civil frente a las normas religiosas y filosóficas, cualesquiera que sean. “Consideramos que es el mejor momento para enfatizar desde uno de los más grandes Poderes de la Unión la defensa de laicismo del Estado mexicano”.

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