El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó tres dictámenes de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, los cuales establecen las características de monedas conmemorativas a diversos acontecimientos históricos.

El primer dictamen con proyecto de decreto fue aprobado en lo general y particular con 275 votos en pro, 86 en contra y 6 abstenciones. Establece las características de veinticuatro monedas bimetálicas conmemorativas de la Herencia Numismática de México.

El objetivo es rescatar y dar una nueva proyección a la herencia numismática del país al revaluar su historia y dar un impulso a la presencia internacional de la moneda mexicana como pieza de colección.

Se trata de una nueva serie de monedas orientadas fundamentalmente al creciente mercado de piezas bimetálicas acorde a la centenaria tradición argentífera de nuestro país.
Mediante este decreto se propone una selección de imágenes de piezas antiguas mexicanas, procedentes de distintas etapas de nuestra historia entre las cuales destacan la época virreinal y la guerra de Independencia; las monedas, relevantes por su significado y belleza, tendrán un valor nominal de 100 pesos.

Los siguientes dos dictámenes fueron aprobados en lo general y particular por 255 votos a favor, 84 en contra y 12 abstenciones.

Uno de ellos establece las características de la moneda de oro conmemorativa Bicentenario del Inicio del Movimiento de Independencia Nacional, con el que se pretende continuar la celebración del Bicentenario; preservar la ancestral tradición numismática mexicana; fortalecer la emisión de monedas conmemorativas, fomentar la industria minera y consolidar la presencia de México en materia numismática a escala mundial. Tendrá un valor nominal de 200 pesos.

El tercer dictamen con proyecto de decreto establece las características de la octava moneda de plata conmemorativa Quinto Centenario del Encuentro de Dos Mundos, la cual tendrá un valor de 5 pesos.

El documento señala que el gobierno español, a través de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda, convocó a los países iberoamericanos a unirse a los festejos para conmemorar, por medio de un programa numismático, el Quinto Centenario del Encuentro de Dos Mundos.

Las monedas bianuales serán acuñadas en plata y en su reverso presentarán un diseño diferente relacionado con el tema de “monedas históricas iberoamericanas”.

Para el caso de México se ha escogido como motivo principal del reverso una réplica de la moneda conmemorativa del Grito de Dolores, conocida como “peso de caballito”, ordenada por el general Porfirio Díaz en 1910 para conmemorar el centenario del inicio del movimiento de Independencia Nacional.

El diputado Mario Alberto Di Costanzo Armenta (PT) se manifestó en contra del dictamen al señalar que hay 10 millones de desempleados y un fideicomiso por los festejos del Bicentenario, aunados a la pobreza y desempleo en que esta sumergido el país. “¿De dónde saldrán los recursos para la emisión de éstas monedas? ¿Qué estamos celebrando? Acaso es el fracaso de una política económica neoliberal”, señaló ante la negativa al primer dictamen.

“Esto nos convierte en cómplices de un mal gobierno, negligencia, corrupción, subejercicios, 140 mil impuestos diferidos de empresas y gente sin empleo. La gente necesita monedas, pero no de cortesía parlamentaria, es una humillación ante absurdas decisiones”, agregó.

En su intervención, el diputado Armando Ríos Piter (PRD) enfatizó que “la aprobación de monedas deja al Legislativo mal parado ante la sociedad, por el fracaso de la economía”. Dijo que se debe aprovechar el discutir un cambio en el modelo económico del país y en una reforma fiscal.

“Que la reforma fiscal no sea vista con la aprobación de monedas, dejemos de discutir en monedas y aprobemos lo que de verdad le beneficie a la nación”.
Los diputados José Gerardo Fernández Noroña (PT) y Pedro Ávila Nevárez (PRI) se manifestaron en contra al considerar que es vergonzante que mientras el pueblo se sume en la miseria se esté votando por monedas conmemorativas.

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