•El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados participó en la ceremonia de homenaje a los Héroes Insurgentes en el Ángel de la Independencia

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, afirmó este sábado que es tiempo de que “convoquemos otra vez a la unidad, a una agenda única, a ser la nueva Independencia y la nueva liberación de estas nuevas formas de esclavitud”.

Al participar en la ceremonia de homenaje a los Héroes Insurgentes en el Ángel de la Independencia, el legislador destacó que si en aquel tiempo la gesta insurgente los liberó de la esclavitud, “hoy debemos reflexionar cómo hemos hecho para reinventarla, y de tantas maneras, 200 años después, de maneras mucho más trágicas. Porque es verdad, somos un país democrático, pero somos también esclavos de intereses particulares. Somos un país libre, pero somos un país cimbrado por la violencia”.

Agregó: “Somos un país de instituciones, pero somos un país, donde las instituciones son amenazadas por la corrupción. Somos un país de iguales y, sin embargo, vivimos en un tiempo donde campea la pobreza”.

Ramírez Marín explicó, ante el Presidente Felipe Calderón, que los mexicanos llevamos 200 años batallando por construir la Nación de todos. “Pero, y hay que decirlo y comprenderlo, afanándonos también, en ser nosotros mismos los artífices del obstáculo, jugando de manera peligrosa, acercándonos a un punto en el que pudiéramos no tener retorno”.

El diputado federal pidió reflexionar hoy y mirar el sacrificio de los Héroes de Independencia, “que no es verdadero más que el que ofrenda la propia vida, en un acto de infinita generosidad, de absoluta convicción acerca de la consecuencia de su gesto. Finalmente, morir ante un pelotón de fusilamiento, sentados en una silla y con los ojos vendados, gesto que es dador de vida, a conciencia de una Nación entera”.

Insistió en que el sacrificio de posponer cualquier interés que no sea el de la unidad nacional, y la victoria definitiva sobre nuestros verdaderos enemigos de hoy: la corrupción, la desigualdad, la pobreza, la injusticia.
“Repasemos este extraordinario país desde esta Columna de la Independencia. Hemos sido capaces de edificar un país significante en el ámbito mundial con un Estado cimentado en instituciones, con un sistema de representatividad siempre dinámico y en construcción. Un país cuya democracia se basa en la educación para todos, en la salud para todos, en las oportunidades para todos y para todas”.

Dijo que México es un país de infraestructura levantada por la inteligencia y las manos mexicanas. Un país de cultura universal, de poesía surgida de la grandeza intangible de nuestra propia alma.

“Démonos cuenta de que en nuestras manos está dejar de socavar nuestro futuro, convoquemos otra vez a la unidad, convoquemos otra vez a una agenda única, convoquemos otra vez a ser la nueva Independencia y la nueva liberación de estas nuevas formas de esclavitud”, concluyó.

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