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Boletín N°. 4188 Entrega la Cámara de Diputados al doctor José Sarukhán Kermez la medalla al Mérito Cívico “Eduardo Neri, Legisladores de 1913”

• Por su trayectoria y conocimiento, su vida es un ejemplo: diputado Emilio Chuayffet
• Mexicano de excepción: diputado Felipe Solís
• Ambientales, nuestros problemas más serios: José Sarukhán

En sesión solemne, la Cámara de Diputados entregó la medalla al mérito cívico “Eduardo Neri, Legisladores de 1913” al doctor José Sarukhán Kermez por su destacado trabajo a favor de la nación como biólogo e investigador emérito del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México, de la cual fue rector de 1989 a 1997.

El diputado Emilio Chuayffet Chemor, presidente de la Mesa Directiva, al hacer entrega del galardón, expresó que educación, Universidad Nacional Autónoma de México y ecología de la biodiversidad, son los ámbitos en los cuales se ha expresado la vitalidad de los valores, el talento y la dignidad que caracterizan a José Sarukhán y que lo han hecho merecedor de esta distinción, “la más alta que entrega esta Cámara de Diputados”.

Durante la ceremonia, el diputado presidente hizo hincapié en la importancia de la educación en nuestro país. Resaltó que ésta ha estado presente en todos nuestros textos fundamentales.

En este contexto, dijo, José Sarukhán, como investigador, director del Instituto de Biología de la UNAM, coordinador de Investigación Científica y Rector, así como impulsor de la creación del Sistema Nacional de Investigadores, ha actuado para y por la educación.

Asimismo, hizo un reconocimiento al trabajo de la Máxima Casa de Estudios del país en su función formativa y cultural al servicio del hombre y agregó que el doctor Sarukhán contribuyó decisivamente al fortalecimiento de la UNAM haciéndola la casa de la libertad al servicio del conocimiento.

Chuayffet Chemor indicó que la ecología ha dejado de ser tema exclusivo de científicos y técnicos para volverse en demanda política de la comunidad, así como una prioridad pública.

Concluyó que, dedicado a ser ambientalista, José Sarukhán ha permitido que la esperanza crezca frente a la apocalíptica visión contemporánea de que el final está cerca. “Por eso hoy, la Cámara de Diputados se congratula al distinguirlo, haciéndole saber a él y al pueblo de México, que en la opinión plural de esta representación nacional, su vida, doctor Sarukhán, es un ejemplo”.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, Felipe Solís Acero, destacó que José Sarukhán Kermez es un mexicano de excepción, comprometido y solidario con su sociedad, preocupado siempre por la degradación de los ecosistemas y la contaminación de la biósfera nos ha acercado a pensar en la ecología como una cosa común.

La vida toda de nuestro galardonado, abundó, nos convoca a compartir una nueva ética sobre la relación que se tiene con el planeta, con el entorno ambiental y con las especies.

El doctor Sarukhán, mencionó el también diputado del PRI, ha contribuido como académico, científico, servidor público y humanista, al desarrollo responsable de nuestro país y del planeta. “Por eso, al hacerle entrega de la medalla Eduardo Neri, esta soberanía reconoce el trabajo científico; premia la calidad excelsa del universitario, galadorna el compromiso social y, en suma, homenajea la inteligencia y la modestia intelectual, “prendas que porta con enorme dignidad”.

En su mensaje, el doctor José Sarukhán Kermez enumeró algunos de los problemas serios y de gran envergadura que nos acechan. Citó como ejemplos: “la inseguridad de la ciudadanía, un sistema educativo deficiente, la fragilidad de nuestro aún bisoño sistema democrático y otros más que conllevan al deterioro de nuestro tejido social y a su vulnerabilidad por la corrupción y por la pérdida y distorsión de valores civiles”.

Agregó que estos problemas encontrarán su solución de manera relativamente rápida en el transcurso de una generación y, en su caso, un poco más, sin embargo, los problemas más severos y complejos son los ambientales. “Hemos perdido una proporción muy grande de nuestra diversidad biológica y desperdiciado en gran medida el conocimiento, la visión y la creatividad de los grupos étnicos”.

El investigador y ecologista subrayó que la pérdida de nuestros ecosistemas, suelos, agua y aire que nos rodea, ha sido enorme. “Su sobreexplotación y el impacto del crecimiento económico han traído como consecuencia un severo deterioro, afectando, además, la salud pública y contribuido a la expulsión de habitantes del medio rural”, indicó.

Aceptó que no todo es negativo, toda vez que en años recientes se han logrado cambios y avances sustantivos para sentar las bases de la conservación y manejo sustentable de este capital.

Advirtió que de no atender frontalmente los problemas que afectan a nuestro entorno natural, “ahora, en esta generación, quizá habremos perdido para siempre las opciones que nos permitan abrigar esperanzas de construir un futuro digno, humano y de justicia social para nuestros hijos”.

La comisión de cortesía, designada para recibir y conducir al salón del Pleno al doctor José Sarukhán Kermez fue integrada por los diputados Felipe Solís Acero y Carlos Flores Rico, del PRI; Laura Arizmendi Campos (Movimiento Ciudadano), José Antonio Arámbula López (PAN); José Luis Jaime Correa (PRD); Juan José Guerra Abud (PVEM); Pedro Vázquez González (PT) y María del Pilar Torre Canales (Nueva Alianza).

Estuvieron como invitados especiales, Rafael Elvira Quesada, secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, representante del Ejecutivo Federal; el senador Arturo Núñez Jiménez, en representación del Senado de la República; Juan Silva Meza, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) José Narro Robles.

De igual forma, los ex rectores de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente Ramírez; Francisco Barnés de Castro y Guillermo Soberón Acevedo. Asimismo, doña Adelaida de Sarukhán, esposa del homenajeado; los doctores Arturo Menchaca Rocha, presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, y Adolfo Martínez Palomo, investigador emérito del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional.

También los doctores Jorge Flores Valdés, coordinador general del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República y Fernando Serrano Migallón, secretario cultural y artístico del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

Igualmente estuvieron presentes familiares del legislador Eduardo Neri Reynoso, quien da nombre a la presea: Martha Badillo de Neri, Martha Neri Badillo, Eduardo Neri Badillo y Bertha Álvarez de Neri.

La sesión solmene, sobria y republicana, inició y finalizó con el Himno Nacional, cantado por los presentes e interpretado por la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México. Al final de la ceremonia, exclamaron un Goya a la UNAM.

Investigador, científico y ex rector de la UNAM

Sarukhán Kermez nació en la ciudad de México el 15 de julio de 1940. Obtuvo el título de biólogo en la Facultad de Ciencias de la UNAM; el de maestro en ciencias, en el Colegio de Posgraduados de Chapingo, y el doctorado en la Universidad de Gales, en la Gran Bretaña.

Ha sido uno de los ecólogos latinoamericanos más reconocidos, además de ser uno de los grandes promotores del desarrollo académico y científico en nuestro país.

Además, es considerado como un científico excepcional que ha dedicado gran parte de su vida a la investigación científica en las áreas de la biología y la biodiversidad, que se ha traducido en un bien para la sociedad mexicana.

Sarukhán Kermez, ha sido investigador del Instituto de Biología de la UNAM, del que también fue director entre 1979 y 1986; fundador del Instituto de Ecología en 1986. En 1992 creó la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).

Fue galardonado con la medalla “John C. Phillips”, máximo reconocimiento de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza; ha recibido siete doctorados honoríficos por las universidades: Mayor de San Marcos, Perú; de Gales, Gran Bretaña; de Nueva York; del Colegio de Posgraduados; de Colima; Autónoma del Estado de Hidalgo y Autónoma de Morelos.

De igual forma, distinciones de las sociedades botánicas de Estados Unidos y México, además del Premio Nacional Forestal (1979); Premio de la Academia de la Investigación Científica (1985); Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Ciencias Físico-Matemáticas y Naturales (1990).

Fue coordinador de la Investigación Científica de la UNAM (1986-1988) y rector de la máxima casa de estudios por dos periodos, de 1989 a 1997. Asimismo, es miembro de la National Academy of Sciences (1993) y de la Royal Society of London (2003).

El doctor José Sarukhán es vicepresidente de honor de la Asociación Mares de México, de la cual es presidente el doctor Mario Molina, premio Nobel de química en 1995.

Su hijo, Arturo Sarukhán, es actual embajador de México en Estados Unidos.

La medalla al Mérito Cívico

El reconocimiento al Mérito Cívico “Eduardo Neri, Legisladores de 1913”, consiste en una presea de oro, acompañada de un pergamino con el dictamen respectivo; un ejemplar del Decreto aprobado por la Cámara de Diputados y un cheque de 210 mil pesos, equivalente a dos veces la dieta mensual de un ciudadano diputado.

Esta presea fue instituida en 1969, por la XLVII Legislatura para reconocer al ciudadano o la ciudadana mexicana que por sus hechos, conducta ejemplar, aportación a la ciencia, el arte o civismo al servicio de la patria, se haga acreedor a la misma. Se otorga por acuerdo de la Cámara de Diputados, previa investigación y dictamen en el que se expondrán los méritos del candidato.

Se otorgó por primera vez en 1969, al ex diputado federal por el Distrito Electoral Federal de Chilpancingo, Guerrero, Eduardo Neri Reynoso, para reconocer su actuación parlamentaria en la histórica sesión del 9 de octubre de 1913, en la XXVI Legislatura, cuando, exponiéndose a ser asesinado, pronunció un discurso en el cual enjuició a Victoriano Huerta por la desaparición del senador Belisario Domínguez y otros legisladores, además de que atacó y criticó duramente al gobierno.

Eduardo Neri Reynoso

En 1913, tras el asesinato de los legisladores Serapio Rendón, Adolfo C. Gurrión, Eduardo Pastelín y el senador Belisario Domínguez, Eduardo Neri, integrante del Partido Liberal Constitucionalista, encabezando una comisión por mandato de la Cámara de Diputados, se entrevistó con el secretario de Gobernación, Manuel Garza Aldape, quien dijo desconocer el asunto, al que juzgó competencia de la policía y, por tanto, manifestó que lo turnaría a las autoridades correspondientes.

Los diputados comisionados volvieron al recinto legislativo e informaron al pleno del resultado de la entrevista. Fue entonces cuando Eduardo Neri, indignado, pronunció un discurso que puede calificarse como el principio del fin de Victoriano Huerta.

Entre otras cosas, el diputado Neri dijo ante el pleno de la Cámara que no parecían hombres los que seguramente habían asesinado al senador Belisario Domínguez, sino “chacales”, pues no contentos con quitarle la vida “devoraron sus restos”.

Neri exhortó a sus compañeros a defender la dignidad del Poder Legislativo y a preservar sus propias vidas, y propuso que de inmediato se tomaran las decisiones apropiadas. La Cámara obró en consecuencia; nombró una comisión de su propio seno para investigar los hechos en que presumiblemente había perdido la vida el senador Belisario Domínguez.

Se acordó dirigirse al Presidente de la República diciéndole que los diputados ponían sus vidas bajo la salvaguarda del propio Ejecutivo y que, en caso de ocurrir alguna otra agresión a los legisladores, la Cámara celebraría sus sesiones en el lugar en que encontrase garantías.

Al tener conocimiento del acuerdo de los diputados, Huerta montó en cólera y ordenó a Garza Aldape que al día siguiente, esto es, el 10 de octubre, se presentara en el salón de sesiones de los diputados, exigiera de inmediato la revocación del acuerdo y que, en caso de negarse, los diputados fueran aprehendidos e internados en la penitenciaría.

Los diputados se mantuvieron firmes, Garza Aldape, quien antes de la sesión había ordenado el despliegue del ejército alrededor del recinto parlamentario e invadido el salón de sesiones, las galerías y el vestíbulo, ordenó la aprehensión de los 83 diputados que se encontraban presentes, quienes fueron remitidos al Palacio de Lecumberri.

Galardonados

José Sarukhán Kermez. Biólogo, investigador y ex rector de la UNAM
(2011) LXI Legislatura
Miguel Luis León y Portilla. Doctor en Historia e investigador emérito.
(2008) LX Legislatura

Raúl Anguiano Valadez. Pintor y muralista.
(2005) LIX Legislatura

Andrés Henestrosa. Poeta, escritor, político y ensayista.
(2003) LVIII Legislatura
Francisco Martínez de la Vega. Periodista, escritor y político.
(1984) LII Legislatura
Doctor Salvador Azuela Rivera. Editor, humanista, jurista y escritor.
(1981) LI Legislatura
Enrique Corona Morfín. Profesor normalista.
(1975) XLIX Legislatura

Jesús Silva Herzog. Economista, sociólogo, historiador y maestro.
(1972) XLVIII Legislatura

Eduardo Neri Reynoso. Diputado.
(1969) XLVII Legislatura

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