El diputado Federico Ovalle Vaquera dijo que 40 mil apicultores enfrentan un dramático revés en su actividad debido a que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2012 les otorga “cero” recursos.

El presidente de la Comisión Especial de Seguimiento a las Evaluaciones Practicadas a los Programas que Conforman el Programa Especial Concurrente para el Campo (PRD) en reunión de trabajo con asociaciones de apicultores, agregó que “se solicitan 390 millones de pesos para la apicultura”.

Mencionó que “en 2011 se asignaron 250 millones de pesos que sumados a la inversión de gobiernos de los estados llegó a 330 nominalmente, no quiere decir que se usaron”.

“Lamentó que el gobierno no le ponga interés a este tema, ya que mandó su propuesta en ceros, que es una muestra del desprecio a esa actividad tan importante”, enfatizó.

El legislador explicó que la Corte de Justicia de la Unión Europea detectó en las exportaciones de miel un porcentaje mínimo de polen transgénico, lo que podría cancelar ese mercado a las exportaciones mexicanas.

“Por esta supervisión que se está haciendo de la polinización que posteriormente va a la conversión en miel, creo que van a tener muchas más dificultades las exportaciones, por lo que se está optando por abastecer el mercado interno, que tiene bajo consumo de miel, e ingresar a Estados Unidos que tienen una normatividad rígida”, dijo.

Ovalle señaló que hasta ahora están prohibidas las siembras de tipo comercial y hay un decreto que establece la posibilidad de siembras de manera experimental, las cuales también deben cancelarse.

Ante todo el panorama crítico para los apicultores, éstos tendrán que invertir en tecnificación, dijo.

Destacó que “hay diputados que somos partidarios de la prohibición del uso de semillas de Organismos Genéticamente Modificados (OGM) por los daños a la salud, económico y social, por lo que deben prohibirse la siembra de éstas”.

Los OGM no generan incremento en la productividad ni mejores condiciones de abasto para consumo nacional y en cambio causan trastornos a la salud y a la biodiversidad.

No obstante, agregó, hay científicos que consideran que deberían de sembrarse OGM porque responden a intereses trasnacionales.

El diputado Avelino Méndez Rangel (PRD) propuso impulsar en la Cámara de Diputados un iniciativa de ley para que los alimentos transgénicos tengan un etiquetado, porque el consumidor tiene derecho a decidir si los compra o no. “Las personas deben conocer lo que comen”.

La etiqueta debe decir “proveniente de Organismos Genéticamente Modificados (OGM)”.

El diputado Emiliano Velázquez Esquivel (PRD) puntualizó que “México como país centro de origen bajo ninguna circunstancia debe permitir la siembra de maíz transgénico, porque de lo contrario, sería una acción irresponsable, miope, de corto plazo”.

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