• Aprueban diputados un dictamen para lograr este propósito

El Pleno Camaral aprobó reformas para considerar a la infiltración de de agua como una medida que coadyuve a mantener los niveles de los mantos acuíferos, mediantes su recarga natural o artificial con las técnicas actuales.

Con 252 votos a favor, uno en contra y dos abstenciones, se avalaron reformas a la Ley de Aguas Nacionales, para declarar de interés público el control de la extracción y de la explotación, uso o aprovechamiento de las aguas superficiales, así como el reuso de las aguas urbanas residuales, mediante previo tratamiento o infiltración.

Al fundamentar el documento, el diputado Eduardo Mendoza Arellano (PRD) expresó que la poca disponibilidad de agua en el país obliga a propiciar un cambio en los hábitos de consumo, desarrollar nuevas tecnologías, difundir las ya existentes para un uso responsable y reformar el marco jurídico para ajustarlo a un nuevo paradigma que ya no conciba al agua como un recurso infinito o abundante.

Indicó en los últimos 50 años la disponibilidad de agua se redujo de 18 mil metros cúbicos por habitante al año, a tan sólo cuatro mil 50 metros cúbicos en la actualidad, por lo que México pasó de ser un país con alta disponibilidad a uno con estrés hídrico.

De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de un total de 653 acuíferos existentes en el territorio nacional, 101 se encuentran sobreexplotados, y otros 69 poseen un grado de sobreexplotación entre el 80 y cien por ciento.

Tal situación, abundó, “implica que en los próximos diez años cerca de 70 acuíferos aprovechables dejarán de existir como fuentes de suministro, afectando a grandes concentraciones metropolitanas, como la Ciudad de México, Guadalajara, León, Saltillo, Tijuana y Torreón, así como diversas unidades de riego”.

Mendoza Arellano agregó que del volumen total de agua que se consume entre todos los usos en el país, 41 por ciento tiene como fuente de extracción acuíferos y, entre éstos, de los sobreexplotados se extrae el 58 por ciento del agua subterránea para todo tipo de consumo.

Al hablar en contra, el diputado Jaime Cárdenas Gracia (PT) señaló que si bien la reforma tiene un propósito loable, hay una parte que no, pues se faculta a las autoridades del agua para establecer estímulos fiscales.

La diputada Laura Viviana Agundiz Pérez (PAN) se pronunció a favor, toda vez que se declare de interés y utilidad pública los sistemas para infiltración de aguas urbanas residuales, así como el reuso de las urbanas residuales, previo tratamiento o infiltración para reabastecer los mantos acuíferos. “Es importante legislar en materia de recarga artificial de acuíferos, considerando la decreciente disponibilidad de agua en diversas regiones del país”.

Por el PRD, el diputado Avelino Méndez Rangel mencionó que el Congreso, además de aprobar el dictamen, debe convocar a todos los sectores para hacer una revisión profunda de la legislación y de la estructura que hoy no responde a los retos hídricos del país.

El diputado Fausto Sergio Saldaña del Moral (PRI) puntualizó que la situación del agua en México es un tema que amerita atención, toda vez que es un recurso necesario para el desarrollo regional y nacional, puesto que su uso para el riego como para el consumo humano en las ciudades y para las actividades industriales resulta elemental.

Se remitió al Senado de la República para sus efectos constitucionales.

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