La Cámara de Diputados aprobó con 272 votos a favor reformas al artículo cuarto transitorio del decreto por el que se expide la Ley Federal de Telecomunicaciones, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 7 de junio de 1995, con el propósito de reconocer como red pública de telecomunicaciones a Telecomm Telégrafos.

Con ello, el organismo, como operador de servicios de telecomunicaciones, se coloca con las mismas ventajas al resto de las operadoras telefónicas, pero dedicado a núcleos de población a los que brindará servicios como el de Internet rural, para cerrar el círculo de acceso a los adelantos tecnológicos aun a las zonas más alejadas.

El dictamen señala que el objetivo es reducir la brecha digital y contribuir a disminuir los rezagos en telecomunicaciones que enfrentan las comunidades indígenas en el país.

Refiere que la Asociación Mexicana de Internet destaca que en 2010 eran casi 40 millones de usuarios en el país; en localidades menores de cinco mil habitantes que disponen de servicios públicos de telecomunicaciones en ese año, 42 por ciento disponía de caseta telefónica de larga distancia; 24 por ciento contaba con teléfono público y sólo 20 por ciento con servicio de Internet. Además, de cada 100 viviendas, 29 poseen una computadora y 21 tienen acceso a Internet.

Al fundamentar el dictamen, el diputado Arturo García Portillo (PAN) afirmó que en virtud de la tecnología y los avances tecnológicos, se puede evolucionar a Telégrafos de México hacia un esquema que no se limite a dar el servicio de telégrafos.

Explicó que este organismo debe operar redes de Internet y telefonía, acceder a los servicios que se dan a través de los satélites y así ampliar y mejorar la cobertura en todo el país, para cerrar la brecha digital respecto de comunidades rurales.

Enseguida, el diputado Francisco Hernández Juárez (PRD) señaló que México está rezagado en el desarrollo de sus telecomunicaciones debido a la falta de inversión, de certidumbre jurídica y de una política de Estado.

Telecomunicaciones de México, dijo, brinda diversos servicios de telegrafía nacional e internacional, comunicación vía satélite y, uno de sus grandes aciertos, es atender a la población rural. No obstante, dijo, los avances no llegan a este sector de la población “que por su ubicación geográfica y sus condiciones económicas no han sido prioridad de las empresas telefónicas”.

Mencionó que actualmente Telecom cobra 2.55 centavos el minuto a quien recibe la llamada, por no fungir como operador telefónico, lo que le impide dar el servicio “el que llama paga”.

La reforma se envió al Senado de la República para sus efectos constitucionales.

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