En la Primera reunión para la codificación del derecho a la paz con perspectiva de género en México, diputadas y especialistas se manifestaron por construir leyes que reconozcan a la paz como un derecho humano y que fortalezcan la dignidad de las personas.

La presidenta del Comité del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género, diputada Mirna Lucrecia Camacho Pedrero (PAN) señaló que a pesar de los avances legislativos para la exigibilidad de los derechos humanos, la equidad, la no violencia y eliminación de la discriminación, es necesario mejorar el marco jurídico e impulsar acciones en favor de la paz.

Hablar de la paz, detalló, implica una serie de conceptos y vivencias profundas que a veces no se toman en cuenta. “Debemos reconocer la dignidad y los derechos iguales e inalienables de toda persona”.

Puntualizó que este tipo de eventos permiten tener una visión más amplia de la paz y su materialización como un derecho humano, “temas en lo que considero nos falta mucho por trabajar desde todos los sectores”.

La diputada María Elena Pérez de Tejada Romero (PAN) precisó que es de vital importancia codificar el derecho a la paz, pues se vive una crisis social. “La paz es libertad, es disfrutar en todos los aspectos y es la mezcla de los valores para conseguir otros derechos humanos”.

Argumentó que el trabajo no sólo debe partir de la codificación sino en la educación, para que los planes de estudios trabajen e incluyan la paz, “porque la consecuencia será no seguir permitiendo el abuso de autoridades y la discriminación”.

De Nueva Alianza, la diputada Elsa María Martínez Peña expresó que “el derecho a la paz es fundamental en una sociedad civilizada, pues la intolerancia, el abuso, el acoso, la exclusión, discriminación y miseria son formas de violencia que destruyen la paz privada y pública necesaria para el pleno desarrollo de las personas”.

Es indispensable, agregó, que las condiciones de paz se lleven a cabo en una auténtica perspectiva de género. “El proceso de codificación del derecho a la paz debe complementarse de manera integral con base en una perspectiva que reconozca las desigualdades estructurales que existen entre los géneros”.

La directora del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género de la Cámara de Diputados, María de los Ángeles Corte Ríos, puntualizó que el Poder Legislativo tiene que analizar qué significa y en qué consiste el derecho a la paz, independientemente de la situación de violencia que se vive. “Es necesario construir un instrumento internacional que contenga este derecho”.

A su vez, del grupo de Educación Popular con Mujeres, A.C, María de Lourdes Valenzuela y Gómez Gallardo dijo que mientras no se atienda el problema de violencia no se dará un salto a la paz, ya que más del 98 por ciento de los asesinatos en el país por el crimen organizado quedan impunes, “es como si la violencia sucede pero no tiene secuelas”.

Del Instituto de Acción Ciudadana para la Justicia y la Democracia A.C, Claudia Cruz Santiago mencionó que las mujeres reiteradamente se enfrentan a la violación de sus derechos civiles, pero el principal problema de la violencia en el país es que está llegando al homicidio y a un Estado que deja a la indefensión la vida de sus habitantes.

En tanto, Paolo Pagliai, director general de Humanidades de la Universidad del Claustro de Sor Juana, subrayó que solamente una sociedad responsable puede pretender ser constructora de paz, de lo contrario, todo se queda en las palabras.
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