•Ayudar a abatir la pobreza alimentaria que ha aumentado 35 por ciento, el objetivo
•De los 52 millones de pobres, 28 millones tienen problemas para alimentarse, consideran

El presidente de la Comisión de Desarrollo Rural, Javier Usabiaga Arroyo (PAN) dijo que es necesario impulsar la seguridad alimentaria a través del apoyo a familias de zonas rurales y urbanas marginadas, para que realicen actividades agropecuarias para el autoconsumo.

En la presentación del Manual básico para la seguridad alimentaria familiar, propuesto por el diputado Alberto Jiménez Merino (PRI), afirmó que la carestía de los productos, las importaciones de alimentos, los drásticos cambios climatológicos son, entre otros factores, que han propiciado el problema alimentario, el cual debe atenderse, enfatizó Usabiaga Arroyo.

El manual establece que la autosuficiencia alimentaria se logrará apoyando a las familias para que realicen diversas actividades agropecuarias, piscícolas, de aprovechamiento de recursos naturales y de autoproducción de alimentos, basadas en el desarrollo de esas capacidades.

Usabiaga Arroyo agregó que con desarrollos tecnológicos innovadores, el manual representa una magnífica herramienta para anexarse a programas como el Proyecto Estratégico para la Seguridad Alimentaria (PESA) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

El diputado Usabiaga coincidió con Jiménez Merino en que el modelo productivo para apoyar a las familias propicia mejores resultados y libera de la presión de gasto a quienes no pueden integrarse al trabajo remunerativo.

A su vez, el diputado Jiménez Merino destacó que el desmedido incremento del precio de los alimentos a nivel mundial provocó un aumento del 35 por ciento de la pobreza alimentaria. “Ahora, 28 de los 52 millones de pobres tienen problemas para alimentarse”.

Alertó que las necesidades alimentarias de los mexicanos se cubren con importaciones, cuando el dólar se encuentra al alza.

Aseveró que en medio de intensas sequías en el Centro-Norte del país, con huracanes en las costas, heladas en el centro y diversas inundaciones con un estimado de producción de maíz y frijol a la baja en 2011 y con una propuesta de presupuesto del Ejecutivo con 34 mil millones de pesos menos para 2012, el panorama es incierto.

Reveló que millones de agricultores no van a tener cosecha. En Durango se estima obtener sólo cerca del 10 por ciento del frijol y en Chihuahua la muerte de ganado es elevada.

Recordó que en el centro del país las heladas afectaron 500 mil hectáreas de pequeños productores de granos básicos.

“Hemos perdido el rumbo y olvidado la planeación; se han privilegiado los programas asistenciales de carácter electorero que lejos de ayudar sólo restan capacidad creativa a las personas, y las vuelven dependientes de apoyos cada vez más difíciles de otorgar ante las crecientes necesidades nacionales”, advirtió.

Agregó que “se requiere conocimiento real del problema y de la voluntad de querer atender lo sustantivo, lo prioritario, lo más importante, ya que en los gobierno se improvisa, se imponen modas, se sesgan atenciones”.

“Se considera que el problema más importante es la inseguridad; ciertamente es una preocupación pero es un efecto, no es una causa y se aborda como si lo fuera, y se ha descuidado la alimentación de las personas, el abasto de agua, el empleo y el ingreso, puntualizó.

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