05-07-2012 El diputado Víctor Castro Cosío (PRD), secretario de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos, señaló que en el presente ciclo escolar 200 mil jóvenes no pudieron acceder a una institución de educación superior.

Precisó que de acuerdo con el Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (Maes) “el año pasado, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dejó fuera a más 181 mil alumnos y sólo dio lugar a 16 mil aspirantes”.

Mientras que para este año el Instituto Politécnico Nacional (IPN) anunció que habrá lugar para 23 mil de un total de 90 mil demandantes; la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) recibirá a 12 mil 500 de 80 mil aspirantes, agregó.

A través de un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente, el diputado dijo que una alternativa es acudir a las escuelas de educación superior privadas, lo que para muchos jóvenes está fuera de sus posibilidades económicas, y optan por no estudiar ni trabajar, o acudir a estas instituciones “ahogándose en deudas”.
Lo que significa que en los hechos, añadió, que la educación superior pasa de un derecho a mercancía, a lucro “en abierta violación a lo ordenado por la Constitución e instrumentos internacionales suscritos por México”.

Consideró que mientras el país se retrasa ante el progreso a nivel mundial de la sociedad del conocimiento, “se mantienen alejados a los jóvenes del estudio, en tanto que la educación, ciencia y tecnología definen el destino de los pueblos”.

Castro Cosío recalcó que es urgente ampliar la matrícula a nivel superior hasta lograr que ningún joven se quede sin esta oportunidad. “Van a ganar ellos, sus familias, sus comunidades, pero sobre todo nuestro país, no sólo en un sentido educativo y económico, sino político y moral”.

Por ello, propuso exhortar al titular de la Secretaría de Educación Pública, José Ángel Córdova Villalobos, para que elabore e impulse un “Plan Urgente Nacional para Ampliar la Matrícula en Nivel Superior”, hasta alcanzar la cobertura total.

Lo anterior, en coordinación con todos los órdenes de gobierno, la Cámara de Diputados, las instituciones de educación superior, “y escuchando al Maes”, en respeto al derecho humano de los jóvenes a la educación, e impulso necesario al desarrollo pleno de la Nación.

“Las instituciones de educación hacen su máximo esfuerzo con sus insuficientes recursos, ahora se requiere que el Estado haga también su máximo esfuerzo para darle prioridad a lo que le da sentido y, es una de sus máximas riquezas, los jóvenes”, enfatizó el legislador.

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