23-08-2012 Gustavo Varela Ruíz, Contralor Interno de la Cámara de Diputados, consideró que es necesario que los órganos de control del sector público logren que los gastos estén sujetos a resultados, a través de una evaluación que permita transparentar y hacer eficiente el uso de recursos públicos.

El funcionario participó en la conferencia La Fiscalización Superior en México impartida por Alfredo Adam Adam, presidente del Patronato de la UNAM, organizada por la Unidad de Evaluación y Control de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y el Instituto Nacional de Administración Pública (INAP).

Resaltó que el proceso de consolidación democrática en el país requiere aplicar una política de consecuencias. Las observaciones que hacen los órganos de control, además de tener un proceso de carácter administrativo debieran implicar una responsabilidad social para el funcionario que incurre en irregularidades en el manejo de los recursos públicos.

“Tenemos un problema en México: a veces premiamos a los corruptos, a veces los envidiamos. A veces decimos tal funcionario es un corrupto, pero que es eficiente”, agregó.

El efecto no sólo deberá ser legal, sino que pudiéramos tener como en otros países la sanción social como una política de transparencia para que el uso de los recursos públicos se aproveche de manera integral, propuso.

A su vez Alejandro Romero Gudiño, titular de la Unidad de Evaluación y Control de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), resaltó que el conferencista insistió en la coordinación entre los sistemas de control interno y control externo, incluso ofreció un concepto: el de la auditoría concurrente.

Afirmó que las observaciones sobre evaluación de impacto y desempeño de Alfredo Adam, se harán llegar a la Comisión de Vigilancia.

Por otra parte, expuso que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) tiene a nivel constitucional una autonomía técnica y de gestión, que se debe fortalecer, así como la fiscalización superior.

En la Comisión de Vigilancia se aprobó un proyecto de reformas constitucionales para fortalecer la fiscalización superior y que está en el Senado para su análisis, precisó.

En su momento, el conferencista Alfredo Adam Adam opinó que no se ha logrado la autonomía de órganos fiscalizadores.

Indicó que en los modelos americano, canadiense y en algunos europeos, el auditor superior es independiente del gobierno federal. Agregó que los resultados de las auditorías internas y externas, están unidos, mientras que en México están separados.

Consideró que hay avances pero faltan pendientes como las auditorías en los estados “que no han funcionado como debería por cambios políticos y de poderes regionales”.

Planteó que debe haber más ejecución, más independencia, más preparación, que los resultados de las auditorías no tarden en darse a conocer hasta un año o más; su periodicidad debe ser breve y la Secretaría de la Función Pública, si se queda como Auditoría Interna, tendrá que funcionar realmente.

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