03-10-2012.- El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados señaló que de continuar los altos niveles en los precios de energéticos y el subsidio a las gasolinas y el diesel, se eliminará la posibilidad de contar con ingresos excedentes y disminuirán las participaciones a estados y municipios.

A través del documento “IEPS a gasolina y diesel”, el CEFP precisó que durante los primeros siete meses de 2012 el subsidio a los combustibles superó el monto previsto para todo el ejercicio fiscal, al llegar a 130 mil 489.9 millones de pesos, lo que significó un avance del 236 por ciento.

Detalló que de enero a junio, el subsidio acumulado ascendía a 121 mil 181.7 millones de pesos, mientras que en julio el subsidio sumó 9 mil 308.2 millones de pesos, el menor monto mensual del presente año.

Mencionó que para el cierre de 2012 se podría llegar a un subsidio superior a los 207 mil millones de pesos, cifra mayor a la estimada en el presupuesto en el cual se calculaba un importe de 172 mil 265 millones de pesos, en tanto que la Ley de Ingresos de la Federación contemplaba que el subsidio ascendería a 51 mil 269 millones de pesos”, agregó.

El CEFP resaltó que de alcanzarse el subsidio estimado, -0.8 por ciento del Producto Interno Bruto- significaría un gasto importante para las finanzas públicas, pues sería equivalente al monto de ingresos para el Instituto Mexicano del Seguro Social señalado en la Ley de Ingresos.

También equivaldría al 81.6 por ciento del presupuesto asignado a la Comisión Federal de Electricidad, o al 82.1 por ciento de lo destinado al ramo 11-Educación Pública.

Enfatizó que los altos precios del petróleo provocaron que se rebasara muy pronto la meta anual estimada en materia de subsidios a la gasolina y al diesel, y señaló que derivado de la estimación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en materia de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) petrolero, habrá dificultad para alcanzar las metas previstas en la Ley de Ingresos de la Federación.

El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas opinó que deben otorgarse beneficios para la población de menores ingresos, en lugar de seguir con un subsidio costoso que protege en mayor medida a los hogares con más ingreso per cápita.

Mencionó que entre 2006 y 2011 los altos precios de los energéticos (principalmente el petróleo) propiciaron que el subsidio a los consumidores de gasolina y diesel haya representado un gasto importante para las finanzas públicas del país, pues en ese periodo alcanzó 654 mil 049.6 millones de pesos.

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