• Develan la placa “Huellas para no olvidar”

25-04-2013.- En la Cámara de Diputados se develó la placa “Huellas para no olvidar”, en honor a los sobrevivientes del Holocausto, además de dar a conocer un punto de acuerdo, a fin de que se cumpla en México un resolutivo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para designar anualmente el 27 de enero como el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

Para evitar que se repita un hecho tan vergonzoso para la humanidad como ese genocidio, que cobró la vida de 20 millones de inocentes durante la Segunda Guerra Mundial en los campos de exterminio nazis. “Nunca más” debe repetirse, coincidieron diputados federales y diplomáticos en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

Los legisladores federales, diplomáticos y sobrevivientes recordaron las actividades preculsoras en la defensa de los derechos humanos del cónsul de México en Marsella, Francia, Gilberto Bosques Zaldívar durante la Segunda Guerra Mundial, el cual gestionó visas de salvación para refugiados de Alemania, Polonia y Francia, y para 23 mil españoles disidentes del franquismo, cuyo legado debe reconocerse al colocar al país en un lugar relevante como defensor de la paz y el humanismo en el concierto internacional.

La diputada Cristina Ruiz Sandoval (PRI), secretaria de la Comisión de Relaciones Exteriores al referirse al punto de acuerdo aprobado por esa instancia y la Junta de Coordinación Política (Jucopo) destacó que servirá para que la Cámara Baja, sin importar cambios de legislaturas o mesas directivas, se comprometa de manera permanente a cumplir el resolutivo 607 de la ONU.

“Esta Soberanía año con año tendrá un acto formal que tenga como propósito impulsar los principios de paz y humanismo entre todos los habitantes del país” aseguró la legisladora federal por el Estado de México ante sus homólogos y diplomáticos.

Ruiz Sandoval afirmó que este punto de acuerdo refleja la importancia de la acción conjunta de los parlamentarios mexicanos para superar diferencias de partido, ideologías y pensamiento, y unirse en propósitos tan loables como conmemorar la memoria de las víctimas y honrar la existencia de los sobrevivientes que habitan en el país.

El diputado Agustín Barrios Gómez (PRD) demandó no olvidar el Holocausto de hace 70 años para no repetirlo, al advertir que la barbarie siempre es cercana, y México no es ajeno a la ultraviolencia sin sentido y absolutamente deshumanizante.

Exhortó a estar conscientes y tener muy presente que “siempre estamos a un paso de la barbarie” cuando se fomenta el discurso del odio y la discriminación, para saber que no estamos a salvo.

Por su parte, Glafiro Salinas Mendiola (PRD) se pronunció a no permitir que la intolerancia rija en el mundo ni en el país, a defender los derechos humanos y mantener vivo el testimonio de los sobrevivientes del Holocausto, como medida de prevención y alerta en una sociedad fustigada por la violencia y el caos, como recordatorio para no repetir uno de los capítulos más vergonzoso y reprobables de la historia humana, exhortó.

El embajador de Alemania en México, Edmun Duckwitz agradeció a la organización Activistas por la Paz, presidida por William Soto Santiago, traer al Palacio Legislativo de San Lázaro el proyecto “Huellas para no olvidar”, para mantener vivo el recuerdo del genocidio y no vuelva a suceder.

Ruslan Spirim, embajador de Ucrania, afirmó que su nación se pronunció por “no a la guerra, optamos por la paz” al desechar todas las armas nucleares que tenía luego de la Segunda Guerra Mundial, y que la colocaban en la tercera potencia armamentista, ya que cada dos familias ucranianas durante la gesta militar perdió un integrante.

El proyecto “Huellas para no olvidar” lo impulsa la organización Activistas por la Paz, incluye la develación de una placa que exhibe en bronce las huellas de las manos precisamente de un sobreviviente del Holocausto, y de su descendencia, a fin de quedar testimonio de la vergonzosa tragedia que implico el genocidio de inocentes durante el nazismo.

La placa develada en San Lázaro contiene las huellas de Peter Katz Bachruch, nacido el 19 de mayo de 1930 en Alemania, sobreviviente que llegó a México en abril de 1946; también se exhiben las huellas de su hijo y nieto, Roberto Katz Neumann y Abi Katz Pérez, respectivamente; placa que hará las veces de monumento itinerante, en virtud, de que será trasladado a diferentes instituciones públicas para que sirva de testimonio para no olvidar el Holocausto y no repetirlo “nunca más”.

-- ooOoo --