• Piden legisladoras dignificar a ese sector y brindar recursos para su atención

• Es el grupo social con mayor marginación y el que sufre más desigualdad

05-09-2013 Al conmemorar el Día Internacional de la Mujer Indígena, legisladoras de los diferentes grupos parlamentarios se pronunciaron a favor de brindar más apoyos a esta población, la cual, lamentaron, se encuentra en mayor desventaja social, cultural, educativa, económica y en salud.

La diputada Sonia Rincón Chanona (Nueva Alianza) afirmó que la importancia de esta conmemoración se encuentra en la considerable presencia de los pueblos indígenas en América Latina y el Caribe, cuya población es de 50 millones, es decir, el 10 por ciento de los habitantes en esta zona del planeta.

Lo anterior “no representa sólo un número, sino gran parte de la identidad cultural de cada nación”. En México, tal identidad “debe ser preservada y tomada en cuenta dentro de las acciones legislativas en afán de garantizar los derechos de las y los indígenas de nuestro país”, propuso.

Subrayó la necesidad de mejorar significativamente su condición y participación en la vida política, cultural, social y económica de México, pues aún existen marcadas brechas de desigualdad.

Por el PT, la diputada María del Carmen Martínez Santillán dijo que para abatir la desigualdad de género, en particular de las mujeres indígenas que luchan por transformar la realidad de sus familias y sus comunidades, queda un camino: iniciar un amplio proceso de educación o reeducación que destierre atavismos y estereotipos.

Para esto, propuso aprobar en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2014 suficientes recursos a programas educativos y sociales que permitan a dependencias públicas cumplir su responsabilidad, teniendo presente la transversalidad de género para ayudar a la mujer indígena a superar los problemas de desarrollo.

“Sólo a través de la educación podremos superar que bajo el pretexto de los usos y costumbres, las mujeres sean excluidas de la participación en actividades políticas o de gobierno de sus comunidades, como, por desgracia, ocurre en algunas entidades federativas”, externó.
Para fijar la postura de Movimiento Ciudadano, la diputada Aída Fabiola Valencia Ramírez sostuvo que los pueblos indígenas aún se encuentran sumidos en la pobreza y la marginación condenándolos a las peores carencias en cuanto a servicios tan básicos como la salud, educación e infraestructura, que en muchas comunidades no existen.

Afirmó que de nada sirven los 74 mil 102 millones pesos aprobados el año pasado y destinados al desarrollo integral de los pueblos indígenas, cuando la planeación del gobierno carece de perspectivas cosmopolitas que aborden el sentido de la entidad, la ubicación social y la integridad de este sector, donde las más afectadas son las mujeres.

Agregó que tampoco importa que el Ejecutivo Federal plasme en su primer Informe de Gobierno que en el rubro de infraestructura básica para la atención de pueblos indígenas se benefició a 1.7 millones de habitantes ubicados en mil 907 localidades de 24 estados, cuando los proyectos de electrificación, agua potable, saneamiento y caminos rurales no fueron considerados para este ejercicio fiscal.

Por su parte, la diputada Judit Magdalena Guerrero López (PVEM) dijo que México es un país multiétnico y pluricultural, donde los pueblos indígenas, según datos del último censo del 2010, representan una población cercana a los 16 millones, la mayoría mujeres.

Subrayó que de acuerdo con un estudio reciente de la Universidad Autónoma de Chapingo, las mujeres indígenas representan el 10.4 por ciento de 57 millones de la población femenina que hay el país. De ahí la importancia de velar por el catálogo de derechos al que hoy tienen acceso, para que siga ampliando y se respete efectivamente.

En este contexto, reiteró que la agenda de su partido pretende motivar a las mujeres indígenas a seguir desarrollándose y apoyarlas para que su crecimiento en materia de igualdad no tenga freno y alcance los niveles que siempre han merecido.

Por el PRD, la diputada Martha Lucía Mícher Camarena, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, advirtió que las mujeres indígenas son quienes se encuentran en peor condición de marginación ya que, según cifras de la Comisión Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), de cada 100 mujeres pobres, 52 son indígenas

“Aún entre las mujeres indígenas no hay igualdad, depende de la zona, región, pueblo y edad. Tenemos que denunciar la realidad devastadora: las mujeres indígenas están en la peor condición de pobreza y marginación, lo que las coloca en vulnerabilidad”.

Afirmó que se debe dignificar a este sector de la sociedad, así como impulsar la difusión de información sobre su derecho a decidir y el uso de los anticonceptivos para que puedan planificar su familia. Denunció que “aún existen lugares en donde si una mujer se casa, deben pasar primero por el cacique del pueblo”.

Al tomar la palabra, la presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas, diputada Eufrosina Cruz Mendoza, del PAN, calificó como un “atentado” dejar morir a las mujeres indígenas que subsisten en la marginación por no estar dentro de los municipios incluidos en la Cruzada Nacional Contra el Hambre.

“Hoy, en el marco de una conmemoración tan importante, alzo la voz para decir que creo en la igualdad, la democracia para alcanzar paz, desarrollo y justicia. Juntos debemos caminar hacia mejores condiciones de las mujeres indígenas en educación, salud, justicia y trabajo”.

Subrayó que es vergonzoso que “haya programas destinados a este grupo social que duerman en los cajones de las dependencias”, por lo que pidió acabar con el doble discurso y cesar el uso de la pobreza con fines políticos.

En tanto, la diputada Josefina García Hernández (PRI) dijo que el 27.6 por ciento de los indígenas son analfabetos y la cifra aumenta entre las mujeres, ya que asciende a 34.4 por ciento, por lo que es indispensable trabajar en una igualdad de oportunidades.

Además de educación, dijo, persisten carencias en la atención médica y empleo, aunado a la violencia de la que son víctimas por su origen, lo que ocasiona que oculten sus costumbres y lengua por miedo a ser discriminadas.

“Las mujeres indígenas conforman un factor de alta vulnerabilidad por su género, etnia y condición socioeconómica que se expresa en los rezagos económicos, políticos y sociales”, apuntó.

La legisladora por Puebla resaltó que se requiere diseñar políticas públicas que cumplan con los compromisos y las doten de mayor presupuesto, considerando que representan el 10.4 por ciento de 57 millones de mujeres en México, quienes son parte integrante de los más de 62 grupos étnicos que cuentan con su propia identidad y cultura.

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