República, dijo que los mandatarios de México y Estados Unidos se deben sientar a dialogar para acordar mecanismos de cooperación que permitan enfrentar la violencia que se registra en la zona fronteriza.

Señaló que no se puede encontrar un entendimiento con declaraciones como las que hizo el embajador de Estados Unidos en México, Tony Garza, sobre el cierre del consulado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, como una forma de castigar a las autoridades del país por su falta de eficacia en el combate a la delincuencia.

El senador Medina Plascencia hizo un llamado a ambos gobiernos para que perdure la cordura y se serenen las declaraciones. “El embajador en algunos momentos se ha excedido en sus palabras, y necesitamos otro tipo de comunicación y diálogo para encontrar caminos de colaboración”, abundó.

No obstante, expresó que es correcto que México alce la voz y señale que el problema de la violencia en la frontera es común y que ningún país puede erigirse como el gran juez y menos como el gran policía del mundo.

En este sentido, indicó que es importante un nuevo diseño de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que todos los países estén coordinados en la lucha contra el enemigo común, que es el narcotráfico.

“No es una lucha de un sólo país, sino que el esfuerzo tiene que ser en conjunto. Nada justifica una actitud unilateral de Estados Unidos cuando sabe de los esfuerzos que ha hecho México en la materia”, agregó.

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