El Pleno de la Cámara de Diputados guardó un minuto de silencio y los legisladores destacaron en Tribuna la solidaridad y entrega de la población, al conmemorar el 20 aniversario de los sismos de 1985.

Diputados de diversos partidos señalaron que la inoperancia, burocracia y corrupción de las autoridades de ese entonces, contribuyeron en acrecentar la pérdida de vidas.

David Hernández Pérez (PRI) se pronunció por presupuestar recursos para crear una instancia especializada que investigue y atienda los eventos sísmicos con una visión de Estado, como la mejor manera de honrar la memoria de los fallecidos en 1985 y de reconocer la labor de los voluntarios en las tareas de rescate.

Reconoció los avances y el desarrollo tecnológico en aspectos como las alarmas sísmicas, pero aseguró que éstos son insuficientes y señaló la necesidad de invertir en investigaciones de ese tipo, además de modificar la regulación en materia de construcción de inmuebles.

Destacó la labor de quienes hace 20 años pensaron en la vida de los demás antes que en la suya y aseguró que, ante la inminente posibilidad de una situación similar, se debe traducir ese riesgo en una oportunidad para que la sociedad se prepare cada vez más en materia de protección civil.

Luis Maldonado Venegas (Convergencia) dijo que se deben destacar los avances en el fortalecimiento de la representación de la sociedad civil y la formación de cuadros que revitalizaron la vida política del país, debido a las formas de organización que surgieron a partir de esos sismos.

Coincidió en que el mejor homenaje a las víctimas sería la aplicación de políticas públicas para conformar un sistema de protección civil a nivel nacional.

Pedro Vázquez, del PT, recordó que el terremoto abrió las entrañas de la corrupción y el desprecio hacia diversos sectores de la población y dijo que ante el pasmo de las fuerzas públicas oficiales, fue el pueblo el que enfrentó la tragedia.

Se pronunció porque nunca sea “secuestrada” esa fecha, para incorporarla en el calendario oficial de la burocracia gobernante, “porque el 19 de septiembre es del pueblo”.

“Debemos garantizar, a través de la ley, que una tragedia de esas dimensiones no vuelva a ocurrir; mejorar las condiciones para que los daños sean menores y que la ciudadanía no sufra por la ineficiencia y corrupción de las autoridades”, abundó.

Guillermo Velasco Rodríguez, diputado del PVEM, pidió reflexionar sobre si en México existe realmente una cultura de prevención de desastres, ya que, agregó, el tres por ciento de la energía sísmica mundial se libera en nuestro país.

Puso en duda la capacidad de los gobiernos actuales para hacer frente a una contingencia similar, en virtud de las carencias y las condiciones adversas en que laboran los bomberos y demás cuerpos de apoyo y rescate.

Francisco Javier Saucedo, del PRD, consideró que el número de muertos y afectados por los sismos mostraron el rostro no solidario de la clase política, por lo que llamó a dignificar la identidad como pueblo solidario y construir una nueva cultura política incluyente, que escuche a la sociedad civil.

“El mejor homenaje a quienes reconstruyeron la sociedad es el redoblar esfuerzos y nuestro compromiso por proteger a la sociedad dándole instrumentos jurídicos que garanticen su participación en los asuntos públicos”, agrego.

También dijo que en 1985 hubo en la clase gobernante responsabilidades por omisión y corrupción.

El diputado Ernesto Herrera Tovar (PAN) aseguró que sí se cuenta con un sistema de protección civil eficiente que coordina los tres órdenes de gobierno, además de la cultura de protección civil y de una clara conciencia de que los sismos son el principal riesgo en la Ciudad de México.

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