El coordinador de los diputados del PRI, Emilio Chuayffet Chemor, afirmó que dejará de asistir a las reuniones semanales que se realizan en la Secretaría de Gobernación, en protesta por la actitud del Secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, en relación a la nueva Ley del Mercado de Valores.

“Desde hace varios días ha estado propalando que he parado la Ley –personalizándolo- porque atiendo a intereses o líneas, no lo acepto, no se lo admito porque durante toda mi vida he sido un funcionario probo y tengo un claro concepto del interés público”, indicó.

También dijo que Gil Díaz “ha estado llamando a los gobernadores para sugerirles tratamientos presupuestales privilegiados a cambio de los votos de los diputados federales de esas entidades en el asunto de la Ley del Mercado de Valores”.

Consideró esa estrategia como “verdaderamente reprobable” y no la compartía. “Esa es la visión de un México autoritario que nadie quiere ver reproducida en los hechos”, agregó.

Recordó que todos los jueves asiste, con integrantes de otros partidos, a una reunión de trabajo en la Secretaría de Gobernación y señaló que el titular de esa dependencia, Carlos Abascal, “tiene voluntad, palabra y conocimientos para ir remontando con nosotros los problemas que van existiendo en la relación Legislativo-Ejecutivo”.

Sin embargo, agregó, “parece que lo que Gobernación teje, el Secretario de Hacienda, como en el 2003 con la Reforma Fiscal, como en el 2004 con sus desaciertos en el Presupuesto de Egresos, lo desteje”.

Chauyffet Chemor dijo que tomó la decisión “de no volver más al grupo de trabajo en la Secretaría de Gobernación”, en protesta por “infundios personales, propalados con el estilito de Hacienda” y por la forma de chantajear a los diputados para que voten las leyes de esa dependencia sin que se reformen.

Aseguró que la fracción del PRI ha estado defendiendo la necesidad de perfeccionar la Ley del Mercado de Valores y que desde que llegó la minuta del Senado ha sido objeto de un estudio pormenorizado.

Indicó que la Ley es buena y se debe aprobar, pero –agregó- “hay tres o cuatro observaciones que en mi opinión merecen, por lo menos, ser discutidas al interior de la Comisión de Hacienda para valorarlas jurídicamente”.

“Lo que a mí me parece que es un derecho primario de los diputados, discutir y reformar cuando lo consideren conveniente y haya mayoría suficiente en las iniciativas de Ley que se someten, al Secretario de Hacienda le parece que es un atentado a la verdad infalible que él posee”, señaló.

Se pronunció porque Gil Díaz haga un reconocimiento público de que sus métodos y estrategias están equivocados y le ofrezca una disculpa personal.

Rechazó que esta situación vaya a poner en riesgo el Paquete Económico 2006 que envió el Gobierno Federal, pero dijo que ahora “todas las cosas las vamos a arreglar aquí”.

“Yo no haré nada que no sea en el escenario de la Cámara de Diputados y si el Presupuesto y la Ley de Ingresos siguen aderezadas por las picardías del señor Gil, que el Gobierno sea el que le pida cuentas o el que haga, como hace un año y hace dos años, caso omiso de sus torpezas políticas”, agregó.

DJ/JGM