Miguel Alonso Raya (PRD), presidente de la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, celebró que se haya resuelto el conflicto laboral en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero advirtió que se requiere una serie de reformas estructurales para darle viabilidad financiera.

En conferencia de prensa, el legislador perredista resaltó el camino de la rectificación y la negociación en la revisión contractual, al retomar la propuesta del sindicato del IMSS sobre el sistema de jubilaciones y pensiones, además de destrabar la contratación de plazas que estaban congeladas desde agosto del año pasado.

Aseguró que además del problema del Régimen de Jubilaciones y Pensiones, el IMSS enfrenta diversos problemas estructurales de financiamiento para el mediano y largo plazo.

Uno de los aspectos que se tienen que revisar, dijo, es el esquema de aportaciones que hacen trabajadores y patrones al seguro de enfermedades y maternidad, ya que actualmente se efectúa sobre la base del salario mínimo, pero se requiere que se calcule de acuerdo al salario base de cotización.

Alonso Raya habló de la urgencia de equilibrar las primas de los seguros de riesgo de trabajo, invalidez y vida, para trasladar sus excedentes al financiamiento de los gastos médicos de los pensionados e incorporar una cuota social a cargo del Estado.

También dijo que se requiere revisar la plantilla y los gastos de las 40 mil plazas del personal de confianza de mandos superiores, que representan una “carga” al Instituto de 13 mil millones de pesos al año.

Eficientar la recaudación para combatir la subdeclaración; reducir el costo de las demandas laborales y fiscales, que son del orden de 20 mil millones de pesos anuales; auditar al IMSS para aclarar qué está pasando con la compra de medicamentos y obras de infraestructura, son otras prioridades del Instituto, abundó.

Destacó la conveniencia de revisar la Ley Federal del Trabajo para que sean incorporados al esquema del Seguro Social los trabajadores que laboran como comisionistas, las empleadas domésticas y los que se desempeñan en la economía informal, que suman un millón y medio de personas.

Por último, aseguró que la urgencia en estos momentos tiene que ver con las negociaciones para que en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2006, se reasignen 26 mil millones de pesos para atender problemas de infraestructura, abasto de medicamentos, gastos de operación, renovación de ambulancias, entre otras carencias que enfrenta el IMSS.

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