Diputados de diferentes fracciones pidieron al legislador Miguel Ángel Toscano Velasco (PAN) que difunda los nombres de los involucrados en presuntos actos de corrupción promovidos por tabacaleras para rechazar un incremento al impuesto de cigarros y se pronunciaron por reglamentar la práctica del cabildeo.
En tribuna, los diputados dijeron que de confirmarse las declaraciones que hizo esta semana el legislador panista, los involucrados habrían incurrido en acciones ilegales, pero de lo contrario se estaría difamando a los 500 integrantes de esta legislatura.
Luego que el PRI y PAN anunciaron esta semana su rechazo al incremento del impuesto a los cigarros, en el marco de la miscelánea fiscal del 2006, el diputado Toscano Velasco dijo a la prensa que la empresa British American Tabacco sobornó con viajes a entre cinco y 10 legisladores para que votaran en contra de ese gravamen.
Este tema fue abordado en la sesión de este jueves y desde tribuna las fuerzas políticas reconocieron que el cabildeo es un quehacer perfectamente ético y válido, que no implica que los legisladores asuman compromisos “vergonzosos”, siempre y cuando esta práctica de convencimiento se sustente en argumentos legítimos.
No obstante, el diputado Luis Antonio Ramírez Pineda, del PRI, consideró inaceptable que se involucre a representantes populares en eventos de corrupción, sin ninguna prueba de por medio.

“Lo delicado de la insinuación mancha el trabajo parlamentario; no se puede aceptar que se hagan ocurrencias y denuncias sin sustento alguno y con tanta irresponsabilidad”, abundó.

Explicó que la postura de rechazar el aumento de ese gravamen se debió a la repercusión negativa que tendría en la industria y los campesinos del ramo.

Luis Eduardo Espinoza Pérez (PRD) dijo que el Toscano Velasco cometió un agravio en contra de la Cámara de Diputados y lo emplazó a revelar los nombres de los presuntamente involucrados en ese delito. “Si no lo hace así, que acepte que está difamando a los 500 diputados de esta legislatura”, indicó.

También insistió en la necesidad de establecer los mecanismos que reglamenten el cabildeo para que los intereses estén debidamente transparentados y garantizar que las decisiones de los diputados sean autónomas.

Guillermo Velasco Rodríguez, del PVEM, recordó que la Constitución Política establece que los diputados no pueden ser reconvenidos por las opiniones que emitan en el ejercicio de su labor legislativa.

Aclaró que el PVEM nunca ha acusado a otro diputado de vender su voto, pero dijo que sí era extraño, sorpresivo y sospechoso, el cambio de decisión del PAN, que se retractó sobre el aumento al impuesto, además de defender a la industria tabacalera con pretextos que no tienen un argumento real.

Pidió que se hagan las investigaciones necesarias para determinar si algún miembro de esta Soberanía aceptó algún obsequio a cambio de su voto, y que de ser así, se le castigue, e hizo un llamado para que los intereses electorales no pesen más que los de la sociedad.

Por el PAN, Federico Döring aseguró que su partido le apuesta al cabildeo, pero se pronunció por transparentar la manera de hacer política por parte de diputados, funcionarios y particulares.

Recordó que el asunto del cabildeo nació en 1997 cuando el PRI perdió la mayoría en el Congreso ante la necesidad de abrir puentes de interlocución entre los intereses legítimos y las demás fuerzas políticas representadas.

“Queremos dejar claro dos cosas: estamos orgullosos de la conducta de los integrantes del PAN en la Comisión de Hacienda y de que somos un grupo democrático donde no hay línea ni imposición y que lo que se acuerda puede ser modificado”, abundó.

Juan Fernando Perdomo Bueno, de Convergencia, aclaró que ningún integrante de su grupo parlamentario ha recibido o aceptado ningún favor de empresa, institución o gobierno alguno para cambiar sus decisiones legislativas.

“Que (Toscano) dé a conocer ante los órganos reguladores los nombres de las personas para no generar confusión. Se tiene que cuidar la imagen del Congreso, y si no hay fundamentos, no se deben hacer esos señalamientos”, comentó.

Pedro Vázquez, del PT, coincidió en que se pretender involucrar a legisladores a favor de intereses de la industria tabacalera y eso desprestigia el trabajo de la Cámara de Diputados. Sin embargo, reconoció que la compra de conciencias de diputados ha sido una práctica recurrente en situaciones coyunturales.

JGM