El vicepresidente de la Cámara de Diputados, Francisco Arroyo Vieyra, dijo que la amistad y solidaridad entre México y Cuba son el pilar de su relación, “más allá de gobiernos en turno”, y exhortó a legisladores de ambos países a “formular nuevas rutas hacia el reforzamiento de la relación”.

Al inaugurar la VIII Reunión Interparlamentaria México-Cuba, que se lleva a cabo en Monterrey, Nuevo León, Arroyo Vieyra señaló la necesidad de darle continuidad e institucionalizar los compromisos que han adquirido a través de este mecanismo parlamentario.

Dijo que esta reunión se realiza “en momentos en que México atraviesa por un difícil momento en sus relaciones exteriores con algunos países de América Latina” y que es “una excelente oportunidad” para refrendar los lazos de amistad bilateral y continuar “con el ejemplo de concordia, cooperación y fraternidad”.

Hizo un recuento histórico y señaló que a más de 100 años de relaciones diplomáticas, ambos países han sido capaces de “rebasar coyunturas que en varias ocasiones, impulsadas por terceros, no encontraron refugio para dividirnos”.

También dijo que en la era de la llamada globalización, México y Cuba deben definir, como latinoamericanos, qué papel tendrán “en ese fenómeno irreversible”.

“Juntos, en diversos episodios hemos demostrado una fortaleza que bajo los principios de la no intervención y autodeterminación de los pueblos han ratificado que nuestra relación histórica siempre ha transitado en el respeto mutuo”, agregó.

Por su parte, el diputado Alejandro González Yáñez (PT), presidente de la delegación mexicana en la interparlamentaria, recordó de manera implícita que México defendió en los años 60 en la Organización de Estados Americanos (OEA) el derecho de Cuba de darse el gobierno que el pueblo demandó en ese momento.

Dijo que “ese gesto permanece firme y lo refrendamos nuevamente en esta ocasión” y señaló la autodeterminación de los pueblos y la no intervención como “premisa fundamental para garantizar la paz y la armonía en el concierto de las naciones”.

Hizo referencia al proceso de globalización y la importancia creciente del capital y preguntó “con qué autoridad moral se impulsa en América toda el libre comercio, cuando se mantiene el criminal bloqueo contra nuestra hermana República de Cuba”.
Dijo que la palabra consenso debe marcar esta interparlamentaria, que debe “dar ejemplo de concordia, creatividad y solidaridad, así como una “señal inequívoca” de que el diálogo e intercambio de opiniones pueden dar buenos frutos.

El presidente de la delegación cubana, el diputado Ramón Fez Ferro, destacó la importancia de este encuentro para darle continuidad a los esfuerzos “por mantener y ampliar el clima de comprensión, de amistad y solidaridad” bilateral.

Dijo que a los legisladores los mueve el espíritu de la cooperación y el intercambio, así como “del respeto mutuo, del respeto a la soberanía de las naciones, del respeto al derecho de los pueblos a darse en sí mismo el sistema político, económico y social que así decida”.

La diputada Adriana González Carrillo (PAN), presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, mencionó la importancia de estas reuniones como un espacio de cooperación, intercambio fluido de experiencias y la profundización de las agendas legislativas bilaterales.

El gobernador de Nuevo León, José Natividad González Parás, también hizo un recuento de la relación “especial” entre ambas naciones, dijo que “no ha sido afectada” por los procesos internos de desarrollo.

Aseguró que los dos países enfrentan el desafío de avanzar en sus procesos de desarrollo político, económico y social, así como en el perfeccionamiento de su vida democrática, e hizo mención a los principios de autonomía y autodeterminación de los pueblos.

Ambas delegaciones acordaron una agenda de cuatro puntos para la VIII Reunión Interparlamentaria desde que se establecieron en 1996, entre los que figuran: Relación Bilateral y Cooperación Binacional; Desastres Naturales y Protección Civil; Educación y Cultura y Salud.

Al encuentro, que concluirá mañana sábado, asisten 13 diputados y tres senadores por parte de la delegación mexicana, de las seis fracciones parlamentarias, y siete legisladores cubanos.

JGM