La Cámara de Diputados aprobó por 366 votos a favor, 0 en contra y 0 abstenciones, reformas a la Ley de Derechos de las Personas Adultas Mayores, a fin de que las familias tengan derecho a recibir el apoyo subsidiario de las instituciones públicas para el cuidado y atención de las personas de la tercera edad, siempre y cuando se demuestre mediante un estudio socio-económico que no cuentan con los recursos necesarios.

El dictamen de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, tiene por objeto reformar el marco jurídico de dicha Ley para garantizar en primera instancia por parte de sus familiares directos, la atención digna a las personas de la tercera edad.

En el documento se obliga a los familiares que cuenten con los recursos necesarios hacerse cargo del cuidado y atención de los adultos mayores, asimismo, se advierte que en caso de no cumplir con dicha obligación, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores deberá asesorar a las personas adultas, para demandar los alimentos a los que tienen derecho.

En el artículo segundo transitorio, se establece que será la Procuraduría General de la República (PGR), la instancia que deberá crear una Agencia del Ministerio Público Especializada en la atención del abandono, maltrato físico o psicológico e incumplimiento general en el otorgamiento de los alimentos a las personas adultas mayores.

La iniciativa presentada el 28 de abril por la diputada Rosa Hilda Valenzuela (PRI), señala que el aumento de los adultos mayores es un hecho indiscutible y por ello, se ha convertido en una preocupación pública por la que la sociedad debe garantizar a todos sus miembros un conjunto de derechos fundamentales.

Se menciona también, que de acuerdo con estimaciones del Consejo Nacional de Población, el número de personas adultas mayores en México es de 7.9 millones, lo cual representa el 7 por ciento del total de la población nacional.

La proyección que se tiene es que llegará a 9 millones en el 2010, a 15 millones en el 2020 y a poco más de 22 millones para el año 2030.

La autora de la iniciativa hace mención de la problemática que enfrentan las personas adultas mayores en esta etapa de su vida como son: encontrase limitados a roles sociales productivos y creativos; desprecio social y discriminación.
También, victimas de múltiples formas de abuso, que van desde el maltrato sexual, físico, económico, verbal y nutricional, siendo las mujeres las más vulnerables a este tipo de agresiones.

MB