Palacio Legislativo de San Lázaro, 11 de abril de 2006.- La presidenta de la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, Jacqueline Argüelles Guzmán (PVEM), aseguró que las alteraciones biológicas producto de la acción de campos electromagnéticos artificiales de alta y baja frecuencia provocan padecimientos graves en la salud.

Por ello, su fracción parlamentaria presentó una iniciativa para reformar la Ley de Radio y Televisión encaminada ha crear los dispositivos de seguridad y eficiencia de los servicios que prestan las radiodifusoras, y contar con las condiciones de mantenimiento apropiadas con el fin de minimizar la contaminación por ondas electromagnéticas.

La legisladora se pronunció en la necesidad de que en nuestro país se cuente con una ley que obligue a la colocación de antenas de radio y televisión donde no afecte la salud de los habitantes, y que los tendidos eléctricos como edificios públicos y privados sean supervisados por las autoridades.

Entre los aparatos que producen alteraciones de alta presión y que provocan, según la legisladores cambios en la temperatura corporal, desequilibrio en los electrolitos de la sangre, dolor muscular y problemas de articulación, entre otros son: antenas de radio, televisión microondas y radares; en tanto que los de baja presión, destacan las líneas de alta tensión, pantallas de televisores, computadoras y trasformadores.

MB