• El gobierno debe intensificar programas de apoyo a migrantes: PAN

• La militarización provocará que se dispare la migración: PRI

• Con la guardia nacional no se resuelve el problema de fondo: PRD

Palacio Legislativo de San Lázaro, 15 de mayo de 2006. (Notilegis).- Luego del mensaje del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, esta noche, sobre el envío de seis mil elementos de la Guardia Nacional a la frontera con nuestro país, el PAN en la Cámara de Diputados se pronunció porque el gobierno de México intensifique los programas de defensa de los derechos humanos de los migrantes. Por su parte, legisladores del PRI y PRD coincidieron en que la militarización de la frontera no resuelve el problema de fondo.

El diputado Rodrigo Iván Cortés Jiménez (PAN) afirmó que el gobierno de Estados Unidos debe resolver las causas de los problemas y no estar con paliativos que sólo son mecánicos o físicos.

Expresó que con el aumento de efectivos de la Guardia Nacional no se resolverá el asunto de fondo. “Es una lógica interna de Estados Unidos. Con esta acción están dando una señal a los grupos republicanos más conservadores que están condicionando la reforma migratoria”, dijo.

El diputado panista aseveró que el gobierno mexicano deberá reforzar los programas para resguardar los derechos humanos de los inmigrantes. “Con esto se tendrá que hacer un trabajo más específico en México. Nos tenemos que poner las pilas y ver los factores de expulsión de los migrantes si, en verdad, queremos resolver el problema”, apuntó.

“Se tienen que reforzar los programas de este lado de la frontera, se deben inyectar recursos adicionales para las agrupaciones Beta; las campañas de concientización de los derechos de los migrantes; los trabajos que realizan los consulados en Estados Unidos, ya que en lo que va de este sexenio se ha cuadruplicado el servicio a los migrantes mexicanos”, sostuvo.

Indicó que el gobierno de México deberá estar pendiente de cómo se realiza el aumento de elementos de la Guardia Nacional para que se dé en un marco de respeto a los derechos humanos y laborales de los connacionales.

Para el diputado priísta, Alberto Aguilar Iñarritú, la decisión aunque soberana del gobierno norteamericano, “sólo va a provocar que se dispare la migración, que se incremente”.

El también integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores precisó que tan sólo en este sexenio, tres millones de mexicanos han emigrado a los Estados Unidos.

Por eso, dijo, “los mexicanos tendremos que estar atentos a lo que suceda en los próximos meses. Vamos a observar una situación muy compleja, porque lejos de que disminuya la migración, ésta se incrementará y traerá consigo más muertes”.
El diputado priísta señaló que esta situación es resultado de la nula capacidad que ha tenido el gobierno del presidente Fox para negociar con el gobierno norteamericano y precisó que es una muestra del fracaso de su política económica de nuestro país “porque el Ejecutivo no ha podido ni ha sabido, crear el número de empleos suficientes con una buena remuneración económica”, añadió.

Por su parte, el diputado del PRD, Miguel Alonso Raya, consideró que el planteamiento de George W. Bush no resuelve el problema de fondo y que la única salida viable es construir de manera conjunta, los gobiernos de México y Estados Unidos, un proceso que permita normalizar plenamente este fenómeno.

“Aún cuando aparentemente se flexibilice la postura, planteando enviar a la policía local a la frontera y proponiendo un plan temporal de trabajadores migratorios, el problema de fondo no se resuelve, pues se siguen violando a diario los derechos humanos, maltratando a los migrantes y tratándolos como delincuentes” subrayó.

Agregó que la actitud del gobierno de Estados Unidos frente al gobierno mexicano es errónea e inadecuada, pues insisten en penalizar a los migrantes y aseguró que sin migrantes el vecino país del norte no puede avanzar.

“En los próximos cuatro años se van a jubilar casi 70 millones de norteamericanos que requieren ser sustituidos y para ello requieren mano de obra migrante, por lo tanto, lo correcto es llegar a un acuerdo migratorio civilizado, responsable que corresponda a los acuerdos comerciales que se tienen”, reiteró.

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