Palacio Legislativo 10-XII-2007 (Notilegis).- La candidata
a dirigir el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (Unifem), Patricia Olamendi, lamentó que en México “no haya nada que celebrar”, en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos.

La feminista lamentó la agresión hacia la periodista Lydia Cacho, no puede haber mayor violencia institucional que la encabeza por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Yo no soy juez pero yo me siente profundamente agredida”.

Durante el foro “La armonización legislativa y la violencia de género” llevado a cabo en San Lázaro, cuestionó la ausencia de herramientas que permitan la defensa de los derechos humanos de las mujeres, como lo señalan los tratados internacionales de los que México forma parte.

La
ex subsecretaria de Asuntos Multilaterales y de Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), refirió que los tratados internacionales son suscritos por el Ejecutivo y avalados por el Senado, sin embargo en su mayoría no se cumplen en la práctica, enfatizó.

La también integrante de Pro Mujer A.C. propuso la integración de una comisión bicamaral que vigile la aplicación de los tratados signados por México y dé puntual seguimiento a las recomendaciones internacionales en el tema de los derechos humanos, principalmente en pro de las mujeres.

“Los Tratados Internacionales sufren una situación compleja, el gobierno se compromete con la población, deben ser vigilados por organismos internacionales, pero ¿Qué tanto se vigilan? y ¿Qué tanto se cumplen?”, cuestionó.

Otro problema, explicó, “es que en los estados no hay observancia de la Constitución, mucho menos de los tratados que se suscriben, se rigen algunas veces por su código civil o penal, lo que impide avanzar en la igualdad”.

Una acción que generaría la igualdad de género es que las mujeres ocupen más cargos de decisión, ya que “no se tiene igualdad desde el municipio, hay que reflexionar sobre la representación de las mujeres en la política, desde la comunidad”, señaló.

En ese sentido, el coordinador de Asuntos Jurídicos del Inmujeres, Pablo Navarrete Gutiérrez señaló la importancia de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV), la cual debe servir de base para que las legislaturas estatales reformen sus leyes para romper “el patriarcado y las actitudes misóginas”.

Agregó que otro reto a superar es el esquema tradicional de la violencia que sólo era considerada en el ámbito familiar. Sin embargo, gracias a la Ley, dijo, “sabemos que la violencia existe en la comunidad, en el espacio laboral, escolar e institucional”.

En tanto, la presidenta de la Comisión de Equidad y Género, Maricela Contreras Julián (PRD), señaló la necesidad de armonizar la legislación nacional en base a los tratados internacionales signados por México para erradicar la violencia de género.

“Es tarea fundamental de los Congresos Estatales y el Distrito Federal armonizar sus legislaciones para hacer operativa la aplicación de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”.

LMGP