Palacio Legislativo 22-IV-2008 (Notilegis).- El diputado Juan Guerra Ochoa (PRD) aseguró que el Frente Amplio Progresista(FAP) se retirará de la tribuna de la Cámara de Diputados y la de Senadores en la medida en que el PAN y PRI firmen el acuerdo que permita un debate nacional de la Reforma Energética.

“Queremos que exista ese compromiso para elevar la calidad del debate que permita que se expresen diversos sectores de la población, sin embargo, no los estamos obligando a que asuman las cosas, pero si hubiera la intención de un fast track estamos en la libertad de hacer resistencia”, dijo.

Guerra Ochoa declaró que los legisladores del PRI y el PAN deben de establecer hoy mismo un compromiso para que las sesiones se puedan reanudar de manera normal y no haya necesidad de continuarlas en una sede alterna.

“Esperamos que el PRI y el PAN establezcan hoy un compromiso para que esto se reanude de manera normal, y no haya necesidad de acudir a un salón alterno”, manifestó.

Asimismo, señaló que de no haber diálogo entre las diversas fracciones parlamentarias, el FAP no desistirá en su posición, ya que “sólo se pide una cosa elemental, que las iniciativas sean discutidas para que no haya sorpresas ni albazos”, refirió.

Insistió que el FAP sólo está esperando que elPRI y el PANfirmen lo prometido para que de manera simultánea en ambas cámaras retiren el plantón, “necesitamos que se firme ese acuerdo”, finalizó.

Por su parte, el coordinador del grupo parlamentario del PT, Ricardo Cantú Garza, descartó la posibilidad de que el Frente Amplio Progresista (FAP) se retire de la tribuna del Salón de Sesiones, debido a que no existe hasta el momento un acuerdo político para que haya un debate nacional para el sector energético.

“Lo que hay hasta el momento es una propuesta de la Mesa Directiva de la Comisión de Energíaa la junta de Coordinación Política, pero no hay acuerdo político con respecto al debate”.

En conferencia de prensa, Cantú Garza recordó que son tres las condiciones queel FAP está solicitando; la primera, que el tiempo del debate nacional sea intermedio entre los 50 días que propone el PRI y los 120 días que sugiere el FAP.

Segundo; que el debate tenga la cobertura en los tiempos oficiales de los medios de comunicación, para que todos los sectores estén informados del avance de este.

Y tercero, que durante el periodo de receso no haya un albazo legislativo que permita plantear el asunto energético.

De esta manera, el legislador insistió que de no cumplirse esas condiciones el FAP continuará con la resistencia.

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