Palacio Legislativo 29-VII-2009 (Notilegis).- El presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, Antonio Ortega Martínez (PRD), alertó que existe un boquete fiscal de casi 600 mil millones de pesos, lo que equivale a la quinta parte del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).

Ante esto, el diputado dijo que una brecha del tamaño de la quinta parte del presupuesto debe ser razón y motivo suficiente para que la Cámara de Diputados revise dónde se tienen que hacer modificaciones y no exclusivamente el Ejecutivo federal.

El diputado aseveró que la Cámara de Diputados aprobó el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2009 y, en un “uso excesivo de facultades”, el Ejecutivo federal decide dónde se hace el recorte presupuestal y cómo se resuelve el problema económico, “cuando el espíritu que establece la Constitución es que los diputados son quienes aprueban y ajustan el presupuesto”, aseveró.

“Estamos hablando de que la próxima Legislatura debe de revisar a fondo este exceso de la facultades que tiene el mandatario y la Secretaría de Hacienda de modificar el presupuesto y hacerle los ajustes. Me parece que es un tema de agenda para la próxima Legislatura”, indicó.

Además, estimó que debe terminar con la figura de los fideicomisos, pues genera opacidad en el manejo de los recursos públicos por parte de las dependencias del gobierno federal.

El perredista señaló que “los mecanismos de guardar recursos por medio de fideicomisos, no están suficientemente claros, hay que terminarlos. La regla debe ser muy clara: se aprueba el presupuesto por la Cámara de Diputados, se liberan por SHCP y, si no se utilizan los recursos como se aprobaron, deben ser reintegrados a la Tesorería General de la Federación para que en el siguiente ejercicio presupuestal se puedan utilizar y aplicar”.

Ortega Martínez subrayó que guardar recursos en fideicomisos para utilizarlos fuera del tiempo o destinarlos a programa no establecidos presupuestalmente es un exceso de facultades del presidente de la República, por lo que “hay opacidad sobre esos recursos y no se puede seguir con transparencia el destino de éstos”.

En ese sentido, el diputado del PRD declaró que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) dio a conocer, en su último informe, que los subejercicios de la Cuenta Pública 2007 alcanzaban los 300 mil millones de pesos, así como mil fideicomisos que no se tienen datos precisos del monto de cada uno, cómo están constituidos, quiénes eran los titulares que administraban ni el plazo en que se vencían.

“Son herramientas que ayudan a la opacidad, poca transparencia y, en ese marco, sirven para actos de facultades indebidas, de discrecionalidad”, agregó.

AILH