Valle de Bravo, Edomex., 25-VI-2010 (Notilegis).- Ante el estiaje y la contaminación que presentan algunas de las presas que nutren al Sistema Cutzamala, existe el riesgo de una crisis de agua potable en el Valle de México, por lo que es necesario concientizar a la sociedad sobre la cultura para el cuidado del agua, afirmó el presidente de la Comisión Especial de la Cuenca del Sistema Cutzamala, José Ignacio Pichardo Lechuga (PRI),

Durante un recorrido de diputados de esa instancia legislativa por las instalaciones del Sistema Cutzamala en el Estado de México, el director de Obras y Agua del Valle de México de CONAGUA, Antonio Gutiérrez Marcus, dio a conocer que la única tubería de alta presión del Sistema Cutzamala, la cual abastece al DFl y al Edomex, ya presenta daños considerables, ya que desde hace 20 años no se le da mantenimiento, por lo que es indispensable construir una nueva, la cual tendría un costo de 280 millones de pesos.

A su vez, el diputado Pichardo Lechuga expresó que después de tres décadas de abandono de la cuenca, se analizará el Presupuesto de Egresos de la Federación, para emprender acciones de desarrollo sustentable de la misma y con el fin de incidir en los programas de infraestructura hidráulica, hidroagrícola, de tratamiento de aguas, de reforestación y conservación de los suelos forestales.

Ignacio Pichardo indicó que los legisladores integrantes de la instancia legislativa pugnarán por una equidad hídrica, al impulsar una reforma a la Ley de Aguas Nacionales, a efecto de que se garantice suministro y beneficios a comunidades que, hasta ahora, sólo ven pasar los millones de litros de agua que consumen 21 millones de habitantes del Valle de México y que proviene en gran proporción del Sistema Cutzamala.

El legislador afirmó que “en estos momentos funciona el Sistema Cutzamala sin ningún problema, pero con el estiaje se están vaciando las presas a niveles alarmantes, lo que podría genera un problema grave para el abasto de agua potable en el Distrito Federal y el Estado de México”.

En ese sentido, destacó que es necesario atender a la ciudadanía en sus requerimientos de agua, a través de programas y acciones coordinadas entre los tres niveles de gobierno, sobre todo de la federación y los Estados de México, Michoacán e Hidalgo, así como el Distrito Federal, junto con la participación de centros de investigación y organizaciones de la sociedad civil.

En su oportunidad, el director General de Obras y Agua Potable y Saneamiento del Organismo de Cuencas y Aguas del Valle de México de CONAGUA, Antonio Gutiérrez Marcus, informó actualmente el Distrito Federal dispone de un abastecimiento de agua potable de 61 mil litros por segundo, de los cuales 39 mil 700 provienen del subsuelo del Valle de México, 14 mil 700 del Sistema Cutzamala, cinco mil 100 del Sistema Lerma y mil 100 de aprovechamientos superficiales como la presa Madín y manantiales.

Gutiérrez Marcus indicó que por sus características orográficas la Zona Metropolita de la Ciudad de México (ZMCM) no dispone de lugares adecuados para almacenar el agua de lluvia, por lo que los más de siete mil millones de metros cúbicos que se precipitan en la cuenca del Valle de México, el 80 por ciento se evapora y el 11por ciento va hacia el subsuelo. “Sólo el nueve por ciento restante, una pequeña parte se regula para su aprovechamiento en el Sistema Cutzamala, mientras que el resto termina en el drenaje”.

Por ello, el ingeniero Gutiérrez Marcus señaló que el Sistema Cutzamala decidió aprovechar las aguas provenientes de las presas El Bosque en Tuxpan, Michoacán; Ixtapa del Oro, Colorines y Valle de Bravo en el Estado de México.

Sin embargo, Antonio Gutiérrez aseveró que es urgente considerar otra fuente alterna para el abastecimiento de agua potable del Valle de México, ya que “si seguimos basándonos únicamente en el Sistema Cutzamala como lo tenemos hoy, difícilmente vamos a mantener una sustentabilidad en los niveles que requieren los ciudadanos del suministro de agua”.

“Es indispensable ir pensando en otra fuente alterna, que nos permita dar esa sustentabilidad y un manejo equilibrado entre la cuenca del Sistema Cutzamala, los acuíferos de la zona metropolitana y una nueva fuente que se determinara, la cual urge”, añadió.

Isac Lira, enviado