Palacio Legislativo 01-04-2011 (Notilegis).- Ante la petición de la ONU de retirar al ejército de las calles, diputados del PRI y PRD urgieron al ejecutivo a atender el exhorto y fortalecer la estrategia de seguridad para combatir al crimen organizado. Mientras que legisladores del PAN aseguró que sería un error retirar las Fuerzas Armadas, ya que las corporaciones policiacas permanecen deficientes.

El presidente de la Comisión de Seguridad Pública, José Luis Ovando Patrón (PAN), refirió que “sería un gran error sacar al Ejército de las calles, porque el país se encuentra en un momento de vulnerabilidad, las policías municipales y estatales, que resultan insuficientes para combatir la ola de violencia”.

“En este momento no se encuentran listas las policías para atender la grave responsabilidad de brindar seguridad a los mexicanos, sería hacerle un daño a la sociedad el retirar las Fuerzas Armadas de las calles que combaten el crimen”, expresó.

El diputado panista reconoció que no se ha invertido los recursos suficientes para fortalecer las corporaciones policiacas del país; por ello, consideró que no es momento oportuno para sacar el Ejército de las calles, ya que la sociedad estaría en una situación de mayor vulnerabilidad.

“Se ha recrudecido la pelea de los cárteles por los territorios en distintas partes del país; necesitamos de la presencia del Ejército para atender la deficiencias y se pueda hacer el trabajo que no pueden hacer las policías municipales y estatales”.

El integrante de las Comisión de Defensa Nacional, Arturo Zamora (PRI), señaló que el Presidente Felipe Calderón debe asumir la responsabilidad del llamado internacional que hizo la ONU para el retiro del Ejército de las calles, y no a las fuerzas castrenses, “que han visto manchada su imagen en la lucha contra el crimen organizado”.

“El Ejército, como institución, está resultando lastimado en su imagen por la determinación que tomó el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas. Este exhorto es el tipo de llamados que debe escucharse con mucha atención y que debe valorarse, porque los organismos internacionales están preocupados en función de lo que emprendió el Presidente Felipe Calderón”.

Agregó: “Es señal de que equivocó la estrategia, y de que las cosas no están resultado bien, sobre todo para la imagen del Estado de Derecho en México”.
El también integrante de las Comisiones de Gobernación y Justicia señaló que “desgraciadamente son impredecibles las decisiones que vaya a tomar el Presidente Calderón”, pese a la presión internacional.

La secretaria de la Comisión de Seguridad Pública, Teresa del Carmen Incháustegui Romero (PRD), señaló que el Gobierno federal pone “oídos sordos” a las críticas respecto a su estrategia contra el crimen organizado, incluidas las voces internacionales que piden la salida del Ejército de las calles.

“Es su gran defecto, porque los sordos se aislan y es lo que le está pasando; no tiene capacidad de escuchar y rectificar; se lo hemos dicho todas las fracciones de la Cámara, desde todos los sectores sociales, los empresarios; todos han expresado su inconformidad por los riesgos de esta estrategia”.

La diputada aseguró que el llamado de Naciones Unidas es pertinente, pues “las políticas de disuasión ponen en riesgo a la población”.

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