Joaquín López-Dóriga, colaborador: Finalmente el presidente Felipe Calderón Hinojosa envió su propuesta de reforma energética al Senado, propuesta en la que dejó en las profundidades del mar el publicitado tesoro y se fue por la máxima elemental de la política y de la vida, en donde la mejor reforma es la posible.

En el tránsito de la publicidad del multiplicado tesoro submarino al envío del proyecto de reforma al Senado el martes por la tarde, corrió un tiempo precioso que unos dieron por ganado y otros por perdido.

Se asegura que en el Senado no hay nada planchado, pero se aceptan las coincidencias que podrían llevar a su aprobación en el Senado antes de fin de mes. Esa es la estrategia de lo que se busca, quedaría la Cámara de Diputados en un periodo extraordinario quizá o en septiembre, pero ya en otra tangente, toda vez que el presidente Calderón no parece dispuesto a pagar un costo que haga del conjunto de su ejercicio de gobierno un rehén de la oposición. Un precio tan alto que lo anula.

Veo que tiene claro que si la reforma propuesta sale bien adelante, y si no, pues a otra cosa y a gobernar con lo que tiene. Duración 1’30”nbsg/m