Más de 100 elementos de seguridad, entre granaderos, policías viales y de sector, son los que resguardan a las afueras de la Arena Ciudad de México, recinto que hoy abre sus puertas al público con un concierto de Luis Miguel.

Aunque hasta el momento no se ha registrado ningún conflicto cerca del lugar, vecinos se aglomeran cerca del recinto y amenazan con realizar una protesta a las afueras del lugar a unos minutos de que arranque el primer concierto.

Ante esto, granaderos arribaron a la Avenida de los Ángeles y Cerrada de los Ángeles, ubicadas a un kilómetro de la Arena, para frustrar el intento de los vecinos por realizar la manifestación.