La industria tabacalera sólo aportó al fondo de gastos catastróficos del seguro popular 55 centavos y no un peso por cada cajetilla vendida, como lo había acordado la Secretaria de Salud, encabezada en la administración pasada por Julio Frenk Mora.

El secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, dijo que de éste impuesto sólo se recaudó 2 mil 511 millones de pesos y no los 4 mil 500 millones de pesos establecidos en el convenio, que autoridades de salud firmaron con empresas cigarreras en junio del 2004.

"Necesitaría ver con la contraloría qué paso", expresó el funcionario quien en la pasada legislatura fue presidente de salud de la Cámara de Diputados.

José Ángel Córdova no quiso reconocer si fue un error o no de la administración pasada el haberse sentado a negociar con la industria tabacalera, pero admitió que hubo momentos en que no sabía para dónde hacerse y se concretó este convenio.

Por ello aseguró que para evitar alguna situación de escepticismo y de cuestionamientos en torno a estos recursos captados por la industria tabacalera y entregados a la federación, el funcionario consideró que lo más claro y transparente es lo mejor, por lo que en esta administración se optó porque estos recursos entraran bien puestos a un fondo de salud que beneficie a todos.

En este sentido, rechazó la propuesta de diputados que los impuestos a los cigarros se vayan directos al Impuestos Especial de Productos y Servicios y no al fondo para el sector salud (Ruth Rodríguez, El Universal online, 13:22, 15/12/06, nbsg).